Mujer abusada en Puerto Viejo tuvo que fingir estar muerta para escapar de atacantes
Así lo indica el testimonio recogido por el colectivo Unidas Talamanca.
Una turista de 20 años de edad de nacionalidad danesa, cuya identidad no se ha revelado, fue víctima de una violación sexual en grupo entre la noche del miércoles y la madrugada del jueves anterior en Puerto Viejo, Limón.
La joven contó al colectivo Unidas Talamanca que tuvo que fingir estar muerta para escapar de los atacantes.
“Ella se tuvo que hacer la muerta y por sus propios medios salió a pedir auxilio”, contó Ana Arenas, activista de la organización, al medio CRHoy.com.
La joven agredida contó que era su último día en Costa Rica pues partiría el jueves a Dinamarca y dijo que había viajado en un tuk tuk rojo que la llevó a la playa donde la esperaba un grupo de hombres. El conductor del tuk tuk y los otros hombres abusaron de la joven.
“La llevó hasta este lugar, que es entre Selina y Tasty Waves, y ahí fue donde la violaron” manifestó Arenas.
Según el relato la joven tuvo que fingir estar muerta durante mucho tiempo. Cuando los hombres se retiraron del lugar, la turista corrió a un bar cercano donde fue auxiliada por los empleados que aún estaban en el local.
La mujer llegó en estado de “shock”, en un principio indicó en un que su amiga de viaje la acompañaba por lo que los presentes en el lugar dieron aviso a las autoridades para iniciar su búsqueda. Luego se confirmó que su amiga estaba en el hotel donde se hospedaron.
Como los vecinos pensaron que había una segunda víctima decidieron ir a la playa a buscarla con linternas y encontraron la ropa de la primera joven. Dieron aviso a las autoridades policiales sobre el hallazgo de la ropa y los uniformados les indicaron que se la llevaran a la turista a la clínica.
“Llamaron a la policía y le tomaron la denuncia desnuda. No hubo ni siquiera un operativo de búsqueda, ni de buscar el tuk tuk, ni de buscar a la gente”, manifestó la activista.
La turista fue trasladada a la clínica de Hone Creek, sin embargo, según el testimonio, les dijeron que debían regresar hasta el siguiente día.
“Ellas no quisieron porque se tenían que ir del país”, explicó Arenas.
El colectivo Unidas Talamanca asegura que esa zona en particular es uno de los lugares donde frecuentemente se cometen este tipo de ataques por ser solitario, con escasa iluminación y rodeado de vegeración.