Urgente: 80,000 Mujeres en Costa Rica Sin Acceso a Productos Menstruales Básicos
En el contexto del «Día de la Higiene Menstrual», la campaña «Cambiemos la Regla» hace un urgente llamado a las autoridades para implementar medidas efectivas contra la pobreza menstrual. Este término se refiere a la falta de acceso a productos de higiene menstrual debido a condiciones socioeconómicas adversas.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), recopilados en la Encuesta de Mujeres, Niñez y Adolescencia, aproximadamente 80,000 mujeres en Costa Rica carecen de productos esenciales como toallas sanitarias, tampones e incluso agua y jabón. Esta alarmante situación provoca que muchas de ellas se vean obligadas a faltar a clases, trabajos y actividades sociales, afectando principalmente a mujeres en zonas costeras.
La encuesta también revela que cerca de 12,000 niñas, adolescentes y mujeres no disponen de un lugar privado para lavarse y cambiarse en casa durante su menstruación. Además, alrededor de 25,300 niñas y adolescentes utilizan materiales inadecuados para la higiene menstrual y carecen de un espacio privado para su cuidado.
Marysela Zamora, directora ejecutiva de Nosotras Women Connecting, enfatizó la importancia de abordar esta problemática: “La menstruación impacta profundamente en la vida y desarrollo de las mujeres, abarcando aspectos económicos, sociales, políticos y culturales. Es fundamental que trabajemos juntos para garantizar que todas las niñas, adolescentes y mujeres tengan acceso a la información y los recursos necesarios para vivir sus ciclos de manera saludable y digna”.
La campaña «Cambiemos la Regla» busca la aprobación de la Ley 22.421 sobre Justicia Menstrual. Esta legislación propone reducir el impuesto al valor agregado (IVA) sobre productos de higiene menstrual, incluir educación menstrual en los planes de estudio de primaria y secundaria, y proporcionar estos productos a poblaciones en centros penitenciarios y en condiciones migratorias.
La implementación de estas medidas es crucial para asegurar que ninguna mujer en Costa Rica tenga que sacrificar su salud y bienestar debido a la falta de productos básicos para la higiene menstrual.