Tiene 10 años y encontró un negocio que le hace ganar miles de dólares mientras va a la escuela
Con una impresora multicolor modelo Bambu Lab P1S, el joven ha creado su propio proyecto.
Jacob Heitmann, un niño de Indiana, Estados Unidos, ha destacado por su capacidad innovadora al combinar sus estudios escolares con un emprendimiento propio a la temprana edad de 10 años.
La jornada matutina de Jacob no solo implica asistir a la escuela, sino también gestionar su pequeño negocio desde la comodidad de su hogar, donde una impresora 3D se encarga de materializar los pedidos que recibe a través de su tienda online. En los primeros cinco meses del año 2024, Jacob ha logrado generar más de 1700 dólares en ingresos.
Su incursión en el mundo empresarial inició cuando tenía nueve años, al solicitar a su abuelo, propietario de un negocio de impresiones, la elaboración de camisetas con el logo de su canal de YouTube. Aunque este primer intento no alcanzó el éxito esperado, vendiendo solo 20 unidades, Jacob no se dio por vencido y buscó una nueva estrategia.
Con el apoyo de sus padres, Jacob creó una tienda en Etsy y, para su cumpleaños en julio de 2023, solicitó una impresora 3D modelo Ender de la empresa Creality, con un costo de aproximadamente 300 dólares. Aunque esta impresora solo podía imprimir en un color, fue suficiente para dar inicio a su nuevo emprendimiento.
Con el tiempo, Jacob invirtió en equipamiento mejorado, solicitando para Navidad de 2023 una impresora multicolor modelo Bambu Lab P1S, valorada en unos 949 dólares. Esto le permitió ofrecer productos de mayor calidad y diversidad.
Cada mañana, antes de partir a la escuela, Jacob verifica su computadora en busca de nuevos pedidos. Si encuentra alguno, pone en marcha su impresora. Los diseños suelen tardar al menos dos horas en completarse, lo que le brinda tiempo para dedicarse a sus estudios antes de regresar a casa para atender su negocio.
Desde enero, Jacob ha obtenido ingresos significativos, principalmente por la venta de juguetes, muchos de los cuales se comercializan por menos de 20 dólares cada uno. Además, un pedido especial en abril, que consistía en 12 réplicas del edificio Chase Tower de Chicago, le permitió incrementar sus ingresos considerablemente, generando un total de 540 dólares.
Los ingresos que obtiene Jacob se destinan a su fondo universitario. A pesar de la creciente demanda, el joven emprendedor no puede aceptar todos los pedidos debido a sus limitaciones de tiempo, por lo que se enfoca en aquellos que considera más interesantes o lucrativos.
Jacob Heitmann es un ejemplo claro de cómo, con determinación y el respaldo familiar adecuado, es posible encontrar un equilibrio exitoso entre la educación y el emprendimiento.