Médico debía operar mano izquierda de niño y le operó la derecha: Ahora enfrentará a la justicia
Después de una década, una madre podría por fin obtener justicia en Argentina, luego de una negligencia médica que afectó a su hijo, cuando apenas tenía tres años de edad.
Redacción
Publicado: junio 17, 2022
Resulta que el menor tenía un problema en su mano izquierda, pues a los ocho meses de vida le diagnosticaron pulgar gatillo; es decir, aquel dedo lo tenía en posición de flexión y era necesario un procedimiento operatorio para darle una correcta movilidad.
Sin embargo, el médico operó la mano equivocada, la cual estaba completamente sana, según consigna la madre denunciante. Diez años más tarde, finalmente se abrirá un juicio en contra del presunto profesional, esperando cumplir el deseo de la mujer: que sea inhabilitado de sus funciones.
¿Qué denunció la madre?
Identificada como Ana, la madre relata que su pesadilla ocurrió en marzo de 2012: «Luego de la operación, el médico reconoció su error, nos pidió disculpas y programó una nueva cirugía para dos días después». Sin embargo, la familia decidió no someter al pequeño a otro procedimiento, por advertencia de otros profesionales de la salud.
«Todo esto fue muy difícil desde que hicimos la denuncia, ya que los médicos de policía evitaban hacer las pericias, nos decían ‘vengan después’ y nos ponían obstáculos», reclama la mujer.
Según cuenta, el proceso de recuperación fue largo para el pequeño, pues recibió tratamiento psicológico durante siete años, debido a los traumas ocasionados por la negligencia: «Él tenía terror a los médicos, a los sanatorios, a la muerte. Quedó muy mal por todo esto».
Sus descargos contra los responsables
Después de todos los años que han transcurrido, Ana dice que «lo único que esperamos es que este médico tome consciencia del daño que ocasionó. Quiero que sepa que operar a un niño lo tendría que hacer de la forma más profesional posible, porque ese día se equivocaron todos, no solo el doctor» del Hospital de Niños Eva Perón.
Fueron dos años y medio los que demoró la Cámara Penal en fijar la fecha del juicio. Al respecto, la progenitora asegura: «Muchas veces, la justicia es injusta y se tendrían que manejar de otra manera. Ahora hay tecnología para resolver casos y no lo sabemos aprovechar».
Sobre sus expectativas en el juicio, concluye que «como mínimo, tendrían que inhabilitarle la matrícula (al médico involucrado), porque fue gravísimo lo que pasó. Lo peor es que estuvo diez años más ejerciendo en ese mismo hospital y en recintos privados, como si nada pasara».
