Estudiante de 19 años muere por un tumor cerebral luego de que médicos creyeran que solo estaba deshidratada
Una mujer de 19 años perdió la vida debido a un diagnóstico erróneo, en el que los médicos creyeron que simplemente estaba deshidratada.
La vida de Ellie Watts dio un giro inesperado cuando empezó a sentirse mareada mientras se probaba un vestido para la boda de su madre. En un principio, tanto su familia como los médicos pensaron que se trataba simplemente de un caso de deshidratación, una situación que se consideró trivial en un principio.
Sin embargo, lo que se percibió como un inconveniente menor se convirtió en una pesadilla para Ellie y su familia. Después de semanas de mareos persistentes, su madre, Catherine O’Connor, decidió llevarla al médico para una revisión más detallada.
Los análisis de sangre iniciales no revelaron ninguna anomalía, lo que llevó a los médicos a descartar los síntomas como deshidratación. Recibieron el consejo de tomar antihistamínicos para combatir los mareos y aumentar su ingesta de agua.
Sin embargo, esta evaluación resultó ser equivocada. Los mareos eran en realidad señales de advertencia de algo mucho más serio: un tumor cerebral. Ellie fue diagnosticada con un astrocitoma pilocítico de grado 1, acompañado de hidrocefalia, una acumulación de líquido en el cerebro.
A pesar de someterse a una cirugía para extirpar la mayor parte del tumor y permanecer estable durante 14 meses, Ellie sufrió un paro cardíaco en octubre de 2023, falleciendo a la edad de 19 años.
Su madre, Catherine, devastada por la pérdida, desea compartir la historia de Ellie para concienciar sobre los tumores cerebrales y prevenir que otras familias sufran un dolor similar. Destaca la importancia de tomar en serio los síntomas médicos y buscar segundas opiniones cuando sea necesario.
Además, enfatiza la necesidad de una mayor conciencia y financiamiento para la investigación de los tumores cerebrales, una enfermedad devastadora que afecta a personas de todas las edades.
Aunque la historia de Ellie es trágica, su legado continúa a través de los órganos que donó, salvando vidas incluso después de su partida. Catherine menciona que su hija donó cinco órganos, lo que permite que Ellie viva en la memoria de aquellos que la conocieron y amaron.