Declaran estado de emergencia por inundaciones en Afganistán: hay más de 300 muertos
La situación en Afganistán ha dejado calles destruidas, llenas de escombros y edificios averiados. Cerca de 100 heridos han sido trasladados a diferentes centros asistenciales.
Redacción
Publicado: mayo 13, 2024
El Programa Mundial de Alimentos de la ONU informó el sábado que más de 300 personas perdieron la vida en inundaciones repentinas que devastaron varias provincias de Afganistán. Estas inundaciones, desencadenadas por fuertes lluvias, desencadenaron ríos de agua y barro que arrasaron aldeas y áreas agrícolas, creando una situación descrita como una «gran emergencia humanitaria».
Las autoridades declararon el estado de emergencia mientras se movilizaban para rescatar a los heridos y desaparecidos. En Baghlan, una de las provincias más afectadas, más de 300 personas perdieron la vida y miles de hogares resultaron destruidos o dañados, según el PMA.
Los datos proporcionados por el gobierno y las agencias humanitarias presentaron disparidades en las cifras de muertos. Mientras que la Organización Internacional para las Migraciones de la ONU reportó 218 muertes en Baghlan, el Ministerio del Interior citó 131 muertes, señalando que la cifra podría aumentar debido a la cantidad de personas desaparecidas.
Las lluvias torrenciales causaron estragos en varias provincias, dejando un saldo trágico en Baghlan, Takhar, Badakhshan, Ghor y Herat. La fuerza aérea inició operaciones de evacuación, trasladando a más de 100 personas heridas a hospitales.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, expresó solidaridad con el pueblo afgano y ofreció condolencias a las familias de las víctimas. La ONU y otras organizaciones humanitarias están trabajando para proporcionar asistencia en las áreas afectadas.
El Comité Internacional de Rescate destacó la urgencia de la situación y recordó a la comunidad internacional la importancia de no olvidar a Afganistán, un país afectado por décadas de conflicto y desastres naturales.
Estas inundaciones son otro golpe para Afganistán, que ya estaba lidiando con una serie de desastres naturales este año. La nación, vulnerable al cambio climático, requiere ayuda inmediata y planificación a largo plazo para abordar estas crisis.
