¿Por qué Bill Gates tuvo que declarar ante la justicia en 1998? El caso Estados Unidos vs. Microsoft
Recuerda por qué Bill Gates tuvo que declarar personalmente ante el Departamento de Justicia de Estados Unidos el 27 de agosto de 1998, y qué hechos similares a los del caso siguen ocurriendo.
Microsoft, una de las compañías de software (y desde hace algún tiempo también hardware) más exitosas desde que surgió la computación personal, ha sido por años objeto de mucha controversia, principalmente por algunas de sus acciones corporativas que no siempre salieron a la luz. Hoy te comentaremos sobre uno de los casos más vergonzosos en la historia de la compañía: una demanda por monopolio hecha por el Gobierno de Estados Unidos, y en la que Bill Gates tuvo que declarar personalmente, en el punto más alto del éxito de su empresa.
Microsoft vs. Estados Unidos
El término “Microsoft vs. Estados Unidos” se utiliza a menudo para referirse a este caso donde se acusó a la empresa de Redmond de faltar al derecho a la competencia, esto es, de incurrir en monopolio. Aunque todo tuvo un contexto específico, había muchos antecedentes que, por años, pasaron desapercibidos, al menos para el ojo público.
Para mediados de los noventa, la mayor parte del mercado de computadoras personales estaba dominada por equipos basados en procesadores Intel y sistemas operativos de Microsoft, es decir, Windows. Tanta era la popularidad de esta configuración que Apple, IBM y Motorola llegaron a un acuerdo para desarrollar la PowerPC e intentar robarle market share a los de Redmond.
Es probable que Microsoft haya sido muy consciente de su ventajosa posición, y que haya querido, por determinadas vías, mantenerla el mayor tiempo posible. Todo llegó a otro nivel cuando la internet se hizo más popular y aparecieron los primeros navegadores web destinados a usuarios.
Una compañía llamada Netscape había logrado por fin crear uno de los primeros navegadores compatibles con imágenes y capaz de ser manejado por cualquier usuario. Sin embargo, no tuvo que pasar mucho tiempo para que Microsoft lanzara su propio browser: el mítico Internet Explorer, del cual incluso hay sospechas de que fue hecho con código robado del mismo Netscape.
Monopolio
El problema mayor no era ese, sino que Microsoft, gracias a sus acuerdos con fabricantes (OEMs) que no querían vender computadoras sin Windows por su popularidad, había provocado que el mercado de computadoras personales esté casi compuesto al 100% por equipos con su sistema operativo preinstalado.
El tema se agravó cuando, junto a la salida de Windows 98, Internet Explorer llegaba como “parte del sistema”, lo que limitaba mucho el alcance de Netscape (y otros browsers como Opera) hacia el público, puesto que ya nadie tenía necesidad alguna de descargar una herramienta para navegar la web, pues ya contaban con una preinstalada.
Más adelante, durante el proceso de la Corte de Apelaciones de Estados Unidos para el Circuito del Distrito de Columbia, se reveló que Microsoft incluso imponía restricciones técnicas a los usuarios que quisieran desinstalar Internet Explorer e instalar otros programas como el propio Netscape y hasta Java. También se decía que habían manipulado la API de Windows (la herramienta oficial para crear aplicaciones para el sistema) para favorecer a su navegador con sitios web de terceros.
Por todo esto y más, Microsoft fue demandada por el Departamento de Justicia de Estados Unidos en mayo de 1998. Meses más tarde, el propio Bill Gates tuvo que declarar ante dicho organismo, el 27 de agosto del mismo año. El caso fue tan preocupante para el CEO que incluso consideró dejar la compañía que él mismo había fundado.
“Si realmente van a arruinar (Microsoft) de esa forma, es mejor que la dividan de una forma totalmente irracional”, diría Gates al Washington Post.
La defensa de Microsoft se basó principalmente en demostrar que Internet Explorer era una parte fundamental de la experiencia de Windows y que era inseparable del sistema operativo, por lo que no era un producto aparte que pudiera desligarse.
El juicio duró 3 años y en el transcurso de estos se dieron muchas más demostraciones de rechazo a Microsoft, tanto de compañías competidoras como de consumidores, incluso públicas. Una de las más conocidas fue el Día de Reembolso de Windows (Windows Refund Day), en el que cientos de usuarios de Linux protestaron ante las oficinas de la empresa porque estaban obligados a comprar computadoras con Windows instalado.
https://youtu.be/m_2m1qdqieE
El acuerdo
Finalmente, el 2 de noviembre de 2001, el Departamento de Justicia llegó a un acuerdo con Microsoft y Bill Gates, en el que se estipuló que la compañía debía otorgar su API a desarrolladores third-party (terceros). Aun así, no se obligó a la empresa a no volver a atar software a cualquiera de sus productos.
En la actualidad, lo mismo que ocurrió con Netscape podría estar ocurriendo con la más reciente versión de Edge, el navegador por defecto en Windows 11. Aun así, Chrome sigue liderando el mercado de browsers y el hecho de que Edge esté ganando adeptos parece favorecer la competencia y la innovación entre ambas aplicaciones.