Madre obliga a su hijo a disculparse con compañera a la que llamó “fea” y “gorda”: tuvo que comprar flores y chocolates
Probablemente no le hará bullying a nadie más.
Una madre soltera de la ciudad de Nuneaton, Reino Unido, se puso furiosa y decidió darle una ejemplar lección a su hijo de 12 años, luego de enterarse de que este estuvo mandando ofensivos mensajes a una compañera de clases a quien llamó «fea» y «gorda«.
Madre furiosa
Al ser alertada por la escuela del niño, Samm Jane(32) decidió confrontar a su hijo Dave y al volver a casa le exigió que le entregara su teléfono celular desbloqueado. En el aparato vio los muchos mensajes de bullying que su retoño había enviado a su compañera, detalla el Daily Mail.
“Él le mandó mensajes de texto a la niña diciéndole: ‘No quiero volver a ver tu fea cara en la escuela. Tu fea cara y gordo cuerpo me ofenden’”, explicó Samm en un video de TikTok.
La mujer detalló que la niña le escribió de vuelta: «Deja de ser malo conmigo«, a lo que su hijo respondió con un mensaje de audio que decía: «Eres asquerosa«.
Samm dijo ponerse furiosa, ya que, como madre soltera, crio a su hijo para que “nunca le faltara el respeto a una niña”.
“Le dije que ella ahora se iba mirar al espejo y se sentiría tan insegura. No lo podía dejar pasar”, explicó la madre en el video que tiene más de 1 millón de reproducciones.
Disculpas con flores y chocolates
La escuela no quiso darle la identidad de la niña a Samm, pero ella dice que usó sus «dotes de detective» y dio con la dirección en donde vivía. «Le dije a Dave que iríamos a disculparnos. No solo con la niña, sino que también con sus padres, sus tías, sus tíos y con quien estuviera en esa casa», dijo.
Además, Samm hizo que su hijo comprara flores y chocolates con el dinero que le había dado para su cumpleaños. Con esto, partieron a disculparse.
Al llegar a la casa de su compañera, fue esta misma quien atendió la puerta. Dave preguntó si sus padres estaban en casa y Samm lo obligó a disculparse en frente de todos ellos, quienes en ese momento se enteraron de la situación.
La niña finalmente aceptó las disculpas y recibió las flores y chocolates. «Él nunca más te hablará así«, le aseguró Samm a la compañera de clases de su hijo.