Es un hecho: este país condenará con cárcel las relaciones sexuales fuera del matrimonio
Eran décadas en las que el país del Sureste Asiático discutía esa reforma en su código penal.
En Indonesia, el Parlamento dio luz verde este martes a enmiendas legales que vetan las relaciones sexuales fuera del matrimonio. La decisión entró en un círculo de cuestionamientos en el que sus principales detractores califican las modificaciones del código penal como un retroceso en materia de libertades.
“Hemos intentado hacer lo mejor para acomodar las importantes cuestiones y las diferentes opiniones que fueron debatidas (…). Sin embargo, es el momento de tomar una decisión histórica en las enmiendas del código penal y dejar atrás el código criminal colonial que heredamos”, señaló el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Yasonna Laoly, en su intervención frente a los diputados.
La decisión llevó a que organismos que defienden los derechos protestaran contra las reformas que, para ellos, representan un golpe a las libertades civiles y un giro hacia una postura fundamentalista. La nación asiática es conocida por ser la que mayor número de musulmanes alberga en todo el mundo.
“La materia penal nacional en el código (…) debe regular el equilibrio entre el interés público o estatal y el individual, la protección de perpetradores y víctimas de delitos, acciones y mentes, seguridad jurídica y justicia, derecho escrito y derecho consuetudinario, valores nacionales y universales, también derechos humanos y obligaciones” de los mismos, agregó Laoly.
¿Cuál es la sentencia?
Aquellos que sean sorprendidos teniendo relaciones fuera del matrimonio pueden enfrentar una sentencia de un año de cárcel. La penalización aplica tanto para los encuentros sexuales previos al matrimonio como fuera de este. Una sanción diferente aplica para la convivencia entre parejas no casadas (incluida en uno de los artículos más controvertidos de la legislación).
El temor hace eco entre la comunidad LGBTIQ+ en Indonesia, donde el vínculo entre personas del mismo sexo tampoco está permitido. Las medidas también empezaron a generar preocupación en el sector del turismo, pues organizaciones de empresarios prevén que puedan verse afectados, a pesar de que las autoridades de Balí dicen que los extranjeros no estarán sujetos a esa ley.
De acuerdo con el documento al que tuvo acceso AFP, sobre quienes viven juntos sin estar casados puede recaer una pena de seis meses de prisión. Para el portavoz del equipo a cargo de la enmienda en el Ministerio de Justicia, Albert Aries, son cambios encaminados a “proteger” la institución del matrimonio.
Alcance de la normativa
En medio de la controversia, el Gobierno aclaró que los actos sexuales extramaritales (o antes de contraer nupcias) solo pueden ser puestos en conocimiento público por el cónyuge, hijos o padres. De esta manera, queda limitado el alcance del seguimiento a esas conductas.
Sin embargo, grupos de derechos humanos se mantienen en que la legislación implica un mayor control de la moralidad y un estancamiento. “Vamos hacia atrás (…). Las leyes represivas deberían haber sido abolidas, pero esta (…) demuestra que los argumentos de los académicos en el extranjero son ciertos, que nuestra democracia está indiscutiblemente en declive”, aseguró a AFP el director para Indonesia para Amnistía Internacional, Usman Hamid.
Por su parte, el Consejo de Ulemas del país asiático, el mayor organismo islámico en ese territorio, rechazó la semana pasada una visita de la enviada especial de Estados Unidos para promover los derechos LGTBIQ, Jessica Stern. La funcionaria tenía previsto llegar al país durante una gira que incluye a Vietnam y Filipinas.
“El consejo declara que rechaza rotundamente la presencia de la enviada especial Jessica Stern en Indonesia entre el 7 y el 9 de diciembre”, aseguró el vicesecretario general del organismo, Anwar Abbas, según dio a conocer la agencia de noticias Antara.
*Con información de AFP y Reuters.