Hackean calculadora científica para instalar ChatGPT y despiertan críticas por posible uso deshonesto
Un desarrollador conocido en línea como ChromaLock generó controversia al modificar una calculadora científica modelo TI-84 Plus para que pudiera operar ChatGPT, el chatbot de inteligencia artificial de OpenAI. Usando un módulo Wi-Fi, ChromaLock transformó este instrumento académico en un dispositivo capaz de responder preguntas complejas, sin necesidad de una computadora o celular. La modificación ha desencadenado un debate sobre el uso de tecnologías avanzadas en exámenes y el riesgo que esto podría suponer para la integridad académica.
En su canal de YouTube, ChromaLock publicó un video mostrando su creación, titulado “Creé el dispositivo de trampa definitivo”. En solo un mes, el video ya acumula más de 1.2 millones de vistas. Aunque el hacker insiste en que su intención es únicamente educativa, los críticos apuntan a que este dispositivo podría facilitar la deshonestidad en evaluaciones académicas al permitir que los estudiantes accedan a un potente asistente de IA durante exámenes.
La adaptación fue posible gracias a la instalación de un microcontrolador ESP32 C3 que permitió a la calculadora TI-32 conectarse a una red Wi-Fi, emulando las capacidades de la TI-84 Plus. Aunque este experimento muestra el potencial de integrar IA en dispositivos tradicionales, replicarlo requiere conocimientos avanzados de programación y equipo especializado, lo que limita su accesibilidad para el usuario promedio.
ChromaLock también compartió instrucciones detalladas en su página de GitHub, proporcionando una guía completa para aquellos interesados en replicar su trabajo. A pesar del interés y las críticas que ha generado, algunos argumentan que el impacto de la tecnología en entornos educativos es inevitable, mientras que otros creen que es esencial establecer límites claros para proteger la equidad en evaluaciones académicas.