Jovencito que murió por caída de árbol en la UCR soñaba con comprar un puesto en la feria para su madre
Su madre, angustiada porque no regresó a casa a medianoche como de costumbre, recibió la terrible noticia a través de una llamada del OIJ, confirmando la pérdida de su hijo.
El trágico fallecimiento de Bryan Rubén Aguinaga Amador, un joven de 23 años estudiante de la Universidad de Costa Rica, ha dejado una profunda tristeza en su familia y la comunidad que lo conocía.
Bryan era un joven trabajador y solidario que, además de estudiar Contaduría Pública en la UCR, ayudaba cada fin de semana a su madre, Karla Amador, en la feria del agricultor en San Juan de Dios de Desamparados. En ocasiones también la acompañaba a vender en las calles de San José o en San Mateo de Alajuela, su lugar de origen.
Su madre relató en una entrevista con el periódico La Teja, que Bryan tenía grandes sueños y un propósito claro: adquirir un puesto en la feria para que ella no tuviera que trasladarse de un lugar a otro. Esa meta, junto con la aspiración de convertirse en profesional, eran los motores que impulsaban su esfuerzo diario.
La noche del 8 de noviembre, Bryan envió un último mensaje a su madre a las 8:56 p.m., mencionando que la fuerte lluvia lo apuraba para tomar el bus. Poco después, una tragedia ocurriría en el campus de la UCR en San Pedro de Montes de Oca. Un árbol de 14 metros cayó, impactando mortalmente al joven que había trabajado tan arduamente para ayudar a su familia. Su madre, angustiada porque no regresó a casa a medianoche como de costumbre, recibió la terrible noticia a través de una llamada del OIJ, confirmando la pérdida de su hijo.
Bryan era conocido por su espíritu incansable y su sentido de responsabilidad, características que mantenía desde que se graduó del Colegio Técnico Profesional de San Mateo en 2019. La partida de este joven, quien había perdido a su padre a los 12 años y siempre se esforzó para apoyar a su madre, deja un vacío que resuena entre quienes lo apreciaban y acompañaban en su camino.