Shanghái confirmó primeras muertes por COVID-19 desde el inicio del confinamiento
En medio del severo brote en Shanghái, producto de la variante ómicron del coronavirus, el Gobierno local informó que las personas “se deterioraron después de ingresar al hospital”.
La megaciudad china de Shanghái registró sus primeras muertes por COVID-19 desde el inicio de su prolongado confinamiento. Se trata del deceso de tres ancianos con problemas de salud, anunció este domingo 17 de abril —lunes 18 en el gigante asiático— el Gobierno local.
“Las tres personas se deterioraron después de ingresar al hospital y murieron luego de que los esfuerzos por revivirlos resultaran inefectivos”, indicó el Ayuntamiento en una red social.
Los muertos son dos mujeres de 89 y 91 años y un hombre de 91, según el Gobierno local, que indicó que todos tenían problemas de salud como enfermedad coronaria, diabetes y presión alta.
En el boletín anterior, Shanghái registró más de 24.000 contagios de coronavirus para sumar más de 350.000 casos totales desde la eclosión, a principios de marzo, de un enorme brote de la variante ómicron que ha provocado el confinamiento de los 25 millones de habitantes de la ciudad.
El director del Ministerio de Salud de Shanghái, Wu Jinglei, anunció este domingo el comienzo —en los próximos días— de una nueva ronda masiva de pruebas (la décima desde principios de mes) para seguir atajando las cadenas de transmisión del coronavirus.
La ciudad quedó completamente paralizada el 5 de abril, tras el fracaso de la cuarentena en dos fases a ambos lados del río Huangpu, Pudong y Puxi, en un cierre que ha provocado una grave escasez de alimentos y otros suministros esenciales, como han reconocido las propias autoridades chinas, sorprendidas por la agresividad de los contagios.
Sin embargo, y tras dos semanas de aislamiento total, las principales empresas de la ciudad han comenzado a definir sus planes de reactivación ante el enorme impacto económico que representa el confinamiento.