La niña que dejó crecer su pelo afro durante 6 años para donarlo a quienes no tienen
Poppy se dejó crecer el cabello durante seis años, hasta que pudo donarlo a una organización que hace pelucas para personas con pelo afro.
Poppy Lee-Burrowes tiene solo 6 años, pero lleva casi toda su vida dejándose crecer el cabello con un objetivo claro.
Desde que cumplió 5 años, ha querido donarlo a The Little Princess Trust, una organización benéfica de Reino Unido que proporciona de forma gratuita pelucas de cabello natural niños y jóvenes que perdieron el suyo por tratamientos contra el cáncer u otras razones.
Pero Poppy tuvo que enfrenarse a un problema.
Su tipo de cabello es muy delicado, y los productores de pelucas le habían advertido que no podrían trabajar con él porque se rompía con facilidad.
Tejer una peluca individual puede tardar entre 30 y 60 horas, y a veces requiriere entre 12 y 14 donaciones individuales de pelo.
Little Princess producía pelucas afro, pero con pelo europeo, cuyo rizo es más «apretado».
Las donaciones de personas de raza negra y mixta estaban limitadas por la fragilidad de los cabellos.
Poppy y su mamá comenzaron entonces a recaudar fondos y juntaron más de US$3.500.
Finalmente, una técnica desarrollada en 2021 hizo posible que la niña cumpliera su sueño.
Sueño complido
El wefting protege el pelo y asegura su longevidad, lo cual significa que la organización benefica ya puede aceptar pelo afro.
«Me siento muy emocionada y siento la cabeza muy liviana. Espero que esto inspire a otros a donar dinero y su cabello», dijo entusiasmada.
«Estoy muy orgullosa de lo que hice. Es importante donar pelo afro porque es una gran parte de la identidad de muchos», contó.
Phil Brace, jefe ejecutivo de Little Princess, comentó que «tener a jóvenes como Poppy es muy reconfortante.»
«Siempre es agridulce porque preferiríamos no tener que hacer estas pelucas», afirmó.
«Los jóvenes ya tienen que enfrentarse al desafío de perder su pelo, y eso se suma a la preocupación de si tendrán la peluca más adecuada».
Beki Lee-Burrowes, la madre de la menor, destacó que «saber que un niño que sufre de cáncer, que está pasando un momento horrible en su vida, tiene acceso al cabello que le representa es muy gratificante para ellas».
Pero este no es el final del camino para Poppy, quien asegura que está preparada para dejar crecer su cabello y volver a donar.
«Estoy deseando volver a hacer esto en el futuro«.