Células cancerosas pueden entrenarse para convertirse en armas contra la enfermedad
Científicos y médicos de todo el mundo trabajan en la creación de un tratamiento eficaz contra el cáncer para acabar con esta enfermedad que causa millones de muertes en todo el planeta.
Uno de los proyectos más recientes, creado por investigadores de Stanford Medicine, utiliza en Estados Unidos una estrategia de algunas ciudades para luchar contra las bandas en la que antiguos miembros educan a los niños y privan a las organizaciones criminales de nuevos reclutas.
“Este enfoque podría abrir una vía terapéutica totalmente nueva para tratar el cáncer”, explica a Metro Ravi Majeti, profesor de hematología y autor principal del estudio.
Como se explica en el estudio publicado en Cancer Discovery, las células T, parte del sistema inmunitario que aprende a identificar y atacar nuevos patógenos como los virus, pueden entrenarse para reconocer antígenos específicos del cáncer, que son proteínas que generan una respuesta inmunitaria.
Por ejemplo, en la terapia con células CAR-T, se extraen células T de un paciente, se programan para reconocer un antígeno específico del cáncer y se devuelven al paciente. Pero hay muchos antígenos del cáncer, y los médicos a veces tienen que adivinar cuáles serán los más potentes.
Una nueva investigación sugiere que un enfoque mejor sería entrenar a las células T para que reconozcan el cáncer mediante procesos que imiten más de cerca la forma en que las cosas ocurren naturalmente en el cuerpo. De forma similar a como una vacuna enseña al sistema inmunitario a reconocer agentes patógenos.
“Nuestro planteamiento es un método novedoso para fabricar una vacuna contra el cáncer; en este caso directamente convirtiendo las propias células cancerígenas en APC que activan las células T anticancerosas”.
Ravi Majeti, profesor de hematología en Stanford Medicine, EE.UU.
Las células T aprenden a reconocer patógenos porque unas células presentadoras de antígenos (APC) especiales reúnen fragmentos del patógeno y se los muestran a las células T diciéndoles: “Este es el aspecto del patógeno, ve a por él”.
Majeti y sus colegas tuvieron la corazonada de que si convertían las células cancerosas en un tipo de APC llamadas macrófagos, serían naturalmente expertas en enseñar a las células T qué atacar.
“Nuestra hipótesis era que quizá las células cancerosas reprogramadas en macrófagos podrían estimular a las células T porque esas APC llevan todos los antígenos de las células cancerosas de las que proceden”, explicó Majeti, que también es catedrático RZ Cao, director del Instituto de Biología de Células Madre y Medicina Regenerativa y director del Centro Ludwig de Investigación y Medicina de Células Madre Cancerígenas.
En el estudio recién publicado, los investigadores programaron células leucémicas de ratón para inducir a algunas de ellas a transformarse en APC. Cuando probaron su estrategia de vacuna contra el cáncer en el sistema inmunitario del ratón, los ratones eliminaron con éxito el cáncer.
Los investigadores descubrieron que, incluso después de algún tiempo, el sistema inmunitario recordaba lo que estas células entrenadas les habían enseñado.
Metro habló con Ravi Majeti para saber más.
Nuevas formas de combatir el cáncer
Fuente: WeForum
Terapia con células CAR-T
Un tratamiento que hace que las células inmunitarias persigan y eliminen las células cancerosas ha sido declarado recientemente un éxito para los pacientes de leucemia. La terapia con células CAR-T consiste en extraer y alterar genéticamente células inmunitarias, llamadas células T, de pacientes con cáncer. Las células alteradas producen unas proteínas denominadas receptores de antígenos quiméricos (CAR). Estos reconocen y pueden destruir las células cancerosas.
Inteligencia artificial
En la India, los socios del Foro Económico Mundial están utilizando tecnologías emergentes como la IA y el aprendizaje automático para transformar la atención oncológica. Por ejemplo, los perfiles de riesgo basados en IA pueden ayudar a detectar cánceres comunes como el de mama, permitiendo un diagnóstico precoz.
Pistas en el ADN del cáncer
En los Hospitales Universitarios de Cambridge (Reino Unido), el ADN de los tumores cancerosos de 12.000 pacientes reveló nuevas pistas sobre las causas del cáncer. Analizando los datos genómicos, los oncólogos están identificando distintas mutaciones que han contribuido al cáncer de cada persona. Por ejemplo, la exposición al tabaco o a la luz ultravioleta, o fallos internos en las células.
Entrevista
Ravi Majeti,
catedrático de Hematología y autor principal del estudio
P: ¿Por qué decidieron utilizar células cancerosas como “armas” contra esta enfermedad?
– En algunos de nuestros primeros estudios, observamos por casualidad que en algunos de nuestros cultivos las células parecían adoptar la morfología de macrófagos con rasgos de células presentadoras de antígenos. Esto nos llevó a la idea de la reprogramación de células cancerosas en APC que podrían estimular respuestas de células T contra las mismas células cancerosas.
P: ¿Cómo se alteran las células cancerosas?
– El paso clave para enseñar al sistema inmunitario del organismo a luchar contra las mismas células cancerosas de las que proceden es conseguir que el sistema inmunitario reconozca el cáncer como algo a lo que dirigirse. Para ello, las células T del sistema inmunitario deben ver las células cancerosas como anormales de una forma determinada. Es decir, unas células especiales denominadas células presentadoras de antígenos deben ordenar a las células T que persigan el cáncer. Nuestro método consiste en convertir las células cancerosas directamente en estas células presentadoras de antígenos, que a su vez instruirán eficazmente a las células T para que ataquen el cáncer.
P: ¿En qué se diferencia su enfoque de otros similares que no han tenido éxito?
– Que yo sepa, no se ha realizado ningún estudio sobre la capacidad de las células cancerosas reprogramadas en APC como método de vacunación contra el cáncer. Este enfoque se basa en un conjunto de trabajos desarrollados en los últimos 10-20 años que han demostrado que se puede lograr la reprogramación de diversas células normales en muchos tipos de tejidos. Pero la idea de que las células cancerosas puedan reprogramarse está relativamente inexplorada.
P: ¿Podría su investigación conducir a la creación de una vacuna contra el cáncer?
– La idea para la traslación clínica es desarrollar métodos para convertir el cáncer humano en APC humanas para la vacunación in vivo o ex vivo contra el cáncer. Esto tendría que hacerse paciente por paciente. Por lo tanto, se necesita mucho más trabajo para convertir esto en un enfoque clínico potencial. Ahora estamos trabajando en estos aspectos.