Volcán Poás mantiene intensa actividad y podría generar nuevos eventos eruptivos
Explosiones alcanzan hasta un kilómetro de altura
El volcán Poás ha experimentado un aumento significativo en su actividad en los últimos días, con erupciones de gran magnitud que han alcanzado hasta 1.000 metros de altura. Durante la noche del sábado, se registró la explosión más fuerte del año, acompañada de incandescencia, fenómeno que se ha repetido de manera continua.
A esta erupción se suman otras dos explosiones de aproximadamente 500 metros sobre el cráter principal, lo que evidencia un incremento en la actividad volcánica que ha llevado a la suspensión de visitas al Parque Nacional Volcán Poás como medida de prevención.
Altos niveles de emisión de gases y afectaciones en la población
El Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (OVSICORI) informó que el Poás está emitiendo entre 600 y 800 toneladas diarias de dióxido de azufre (SO₂), niveles que superan hasta cuatro veces la cantidad normal.
Como consecuencia, habitantes de comunidades cercanas han reportado irritación en las vías respiratorias, especialmente durante la noche y la madrugada, cuando los gases quedan atrapados en capas de aire frío, aumentando su concentración.
Riesgo de lahares y contaminación de fuentes de agua
El río Desagüe, que drena parte de la actividad volcánica, ha cambiado a un tono grisáceo debido a la acumulación de material piroclástico y ceniza.
Expertos de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) han advertido sobre el posible desarrollo de lahares, una mezcla de agua, ceniza y escombros volcánicos que podría descender en las próximas semanas, representando un riesgo para comunidades aledañas.
Monitoreo constante y medidas de prevención
Las autoridades mantienen un seguimiento exhaustivo de la situación para evaluar la evolución del fenómeno y emitir alertas tempranas en caso de que la actividad se intensifique.
Se recomienda a la población seguir los reportes oficiales, evitar acercarse a zonas de riesgo y tomar precauciones ante la posible caída de ceniza en regiones cercanas.