Seis equipos en apuros por la regla Sub-21
Seis clubes enfrentan retos para cumplir con la regla Sub-21
En la recta final de la fase regular del campeonato nacional, seis equipos de la primera división aún enfrentan dificultades para cumplir con la regla Sub-21. Esta normativa exige que cada equipo acumule un número mínimo de minutos con jugadores menores de 21 años durante el torneo, bajo pena de perder tres puntos en la tabla general.
Equipos comprometidos y minutos pendientes
Clubes de renombre en la lista
Entre los equipos en riesgo se encuentran dos de los clubes más destacados del fútbol nacional: Deportivo Saprissa y Club Sport Cartaginés. A ellos se suman Santos de Guápiles, Municipal Pérez Zeledón, Liberia y Guanacasteca, quienes también enfrentan el desafío de cumplir con los minutos restantes antes del cierre de la etapa regular.
Guanacasteca, el caso más crítico
El equipo más comprometido con la regla Sub-21 es Guanacasteca, que aún debe completar 263 minutos para evitar la sanción. Este déficit se convierte en una presión adicional, ya que cualquier pérdida de puntos podría influir directamente en su posición final en la tabla.
La sanción de tres puntos y su impacto en la clasificación
Una normativa con peso en el cierre del torneo
La regla Sub-21 busca fomentar el desarrollo de nuevos talentos en el fútbol costarricense, pero su incumplimiento puede tener consecuencias significativas. La pérdida de tres puntos para los equipos infractores no solo afecta su posición en la tabla, sino que también podría ser determinante en la clasificación para las etapas finales.
Escenarios posibles
Para equipos como Saprissa y Cartaginés, que compiten por los primeros puestos, una sanción podría complicar sus aspiraciones de avanzar a semifinales. Por otro lado, clubes como Guanacasteca y Liberia, que luchan en la parte baja de la tabla, podrían verse aún más perjudicados en su intento de evitar el descenso.
El tiempo apremia
Con el final de la fase regular a la vista, los seis clubes deberán realizar ajustes estratégicos para sumar los minutos necesarios. Esto podría incluir un mayor protagonismo de jóvenes en los últimos partidos, aunque eso implique sacrificar experiencia en el campo.
La situación plantea un debate entre cumplir con la normativa y mantener el rendimiento competitivo, poniendo a los entrenadores en una posición delicada.