Pilar Cisneros defiende eventual renuncia de Rodrigo Chaves: ‘No es un atentado contra la democracia’
Redacción
Publicado: enero 6, 2025
La diputada oficialista Pilar Cisneros ha salido en defensa de una posible renuncia del presidente Rodrigo Chaves para postularse como diputado en las próximas elecciones. Según Cisneros, tal acción estaría respaldada por la Constitución Política y no debería interpretarse como una amenaza al sistema democrático costarricense.
Debate sobre la democracia y la Carta Magna
En declaraciones ofrecidas durante el programa Asiento Extra, Cisneros fue enfática en su posición: «El presidente puede renunciar cuando él quiera. Jamás, jamás, va a ser un atentado contra la democracia». Estas palabras respondieron directamente a las afirmaciones de Miguel Guillén, secretario general del Partido Liberación Nacional (PLN), quien había calificado una eventual renuncia como un atentado al orden democrático.
Cisneros destacó que la Constitución contempla la posibilidad de que el mandatario abandone su cargo, para lo cual existe una fórmula presidencial que incluye a dos vicepresidentes. “Es un mecanismo previsto para garantizar la estabilidad política en casos como este”, explicó la legisladora.
Contexto político y proyecciones electorales
El debate surge en un momento en que el «Rodriguismo» evalúa opciones para mantenerse relevante en las elecciones nacionales de 2026. Cisneros señaló que están analizando con calma qué partido representará esta corriente política, una decisión que tomará tiempo y cuidado estratégico.
De acuerdo con el cronograma del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), si Chaves decide buscar una diputación, tendría que presentar su renuncia antes del 31 de julio de 2025. Esta fecha límite será clave para determinar los pasos a seguir tanto para el mandatario como para su movimiento político.
Opiniones divididas
La posibilidad de que el presidente Rodrigo Chaves renuncie a su cargo ha generado un debate en la esfera política y entre analistas. Mientras algunos consideran que podría ser una jugada legítima para fortalecer su influencia política, otros ven esta opción como un riesgo para la estabilidad institucional del país.
