Más de 13 mil hombres fueron agredidos en sus hogares el último año en Costa Rica
Para empeorar la situación, varias “masculinidades tóxicas” lleva a que muchos hombres callen la violencia que sufren.
La violencia doméstica en nuestro país es una gran problemática que afecta a personas de todas las edades y, aunque es más común que la víctima sea una mujer, hay una gran cantidad de hombres que también sufren de estas agresiones.
Cada vez hay más hombres agredidos
El 80% de los casos de violencia que se denuncian todos los días corresponde a víctimas de sexo femenino y un 20% a los hombres. Cabe aclarar que, aunque la violencia de pareja cabe dentro de la agresión doméstica, esta última puede venir de padres, madres, hijos e hijas, novios y novias, etc.
Durante el pasado 2018, se presentaron 13.730 denuncias por parte de hombres que alegaban ser víctimas de violencia doméstica (sin contar las muertes), según un estudio realizado por la sección de Subproceso de Estadística, Dirección de Planificación de la oficina del Observatorio de violencia de género del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), todo elaborado con datos registrados por los Juzgados de Violencia Doméstica.
Adultos mayores son las principales víctimas
Casi la mitad de presuntas víctimas son solteros, mientras que el resto son casados o divorciados. Para hacerlo más preocupante, el 27% de hombres agredidos corresponden a adultos mayores que superan los 63 años de edad, mientras que muchos casos se presentan entre los 27 y 35 años.
De la misma manera, las mujeres entre los 27 y 35 años son a las que más se les acusa de agredir a alguien de su casa (25%), esto según las estadísticas del OIJ tras las 132 solicitudes de protección que se realizan diariamente por esta lamentable situación.
Machismo lleva a callar a muchas víctimas
Dentro de la masculinidad tóxica de la que muchos hombres presumen, se encuentra el orgullo que les impide ir a denunciar ante las autoridades que son agredidos y, peor aún para ellos, por una mujer. Los datos con los que se cuenta actualmente corresponden a las denuncias recibidas, pero se cree que un muy gran porcentaje no es llevado a las instancias judiciales por la propia decisión de la víctima.