Lo que nunca te dijeron: El riesgo de comer alimentos quemados
Aunque es común disfrutar de alimentos crujientes, como tostadas bien doradas o carnes a la parrilla, el hábito de consumir comidas excesivamente cocinadas puede tener consecuencias graves para la salud. Cocinar los alimentos a temperaturas demasiado altas puede generar sustancias químicas peligrosas, que se forman al quemar o tostar en exceso ciertos ingredientes, y estas pueden aumentar el riesgo de padecer enfermedades crónicas.
La dietista y nutricionista Elisa Escorihuela, en una entrevista para ‘ABC’, advirtió sobre la acrilamida, una sustancia que aparece cuando alimentos ricos en almidón, como el arroz, las papas y la pasta, se cocinan a temperaturas elevadas. Este compuesto ha sido clasificado como «probablemente carcinógeno» por la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC), lo que significa que su consumo excesivo podría incrementar la posibilidad de desarrollar cáncer.
Sin embargo, no es la única sustancia peligrosa que se produce al cocinar de más. También existen los hidrocarburos aromáticos policíclicos y las aminas heterocíclicas, que se generan cuando las carnes son sometidas a temperaturas demasiado altas, como al asarlas o freírlas. Estas sustancias, al igual que la acrilamida, pueden dañar la salud, sobre todo el sistema digestivo.
La exposición continua a estos compuestos químicos puede contribuir al desarrollo de diversos tipos de cáncer, como el de colon, páncreas, estómago y esófago, así como otras enfermedades crónicas como la inflamatoria intestinal. Aunque la relación entre estas sustancias y ciertas enfermedades no es del todo directa, el consumo frecuente de alimentos cocidos a altas temperaturas puede empeorar los síntomas y aumentar los riesgos.
Para evitar estos efectos perjudiciales, Escorihuela aconseja que los alimentos ricos en almidón no se cocinen a más de 120 grados Celsius. En cuanto a las carnes, es recomendable evitar que se doren en exceso, especialmente al prepararlas en la sartén o a la parrilla. Si se utilizan parrillas, es importante limpiar bien la superficie para reducir la formación de estos compuestos peligrosos.
Aunque puede ser tentador disfrutar de comidas muy tostadas, es esencial ser consciente de cómo ciertos métodos de cocción pueden afectar nuestra salud a largo plazo.