Hacienda revela dato alarmante: deuda pública en niveles históricos: el déficit que amenaza a todos ¿qué significa para tu bolsillo?
Un factor clave en este descenso ha sido la caída del impuesto sobre la renta para empresas, que disminuyó en ¢114.340 millones en comparación con el mismo periodo del año pasado
El Ministerio de Hacienda ha advertido un marcado deterioro en las cifras fiscales del país, según la actualización correspondiente a agosto de 2024. Este desbalance se ha producido por el incremento en los gastos del gobierno y el alza en los intereses de la deuda pública, mientras que la recaudación de impuestos ha mostrado una notable desaceleración.
Un factor clave en este descenso ha sido la caída del impuesto sobre la renta para empresas, que disminuyó en ¢114.340 millones en comparación con el mismo periodo del año pasado. Esta baja, que representa un 11,5%, ha sido la más significativa en la afectación de los ingresos del gobierno. La variación del tipo de cambio ha sido uno de los factores que ha influido en esta reducción.
El ministro de Hacienda, Nogui Acosta, expresó su preocupación al señalar que aún existe un superávit primario, pero que es un “grave error” suponer que esto soluciona el problema fiscal del país. El déficit fiscal, que es la diferencia entre los ingresos y gastos totales del gobierno, se incrementó del 2% al 2,5% del PIB, lo que representa un faltante adicional de más de ¢300.000 millones. Se estima que el déficit podría alcanzar un 3,7% del PIB a finales de este año, superando el 3,3% registrado en 2023.
Los intereses de la deuda pública han alcanzado niveles históricos, representando un 3,44% del PIB, lo que equivale a ¢1.690.680 millones en los primeros ocho meses de 2024. Este es el valor más alto registrado en las últimas dos décadas, y sigue en aumento debido a las elevadas tasas de interés.
El crecimiento de los gastos en remuneraciones y transferencias también ha contribuido al deterioro de las finanzas públicas. En cuanto a las remuneraciones, el retroactivo de incrementos salariales ejecutado entre marzo y abril incrementó el gasto en ¢111.434 millones.
A pesar de los esfuerzos del gobierno por aumentar los ingresos a través de impuestos selectivos y del impuesto al valor agregado (IVA), los resultados han sido insuficientes para contrarrestar la caída en otros rubros como el impuesto sobre la renta y la propiedad. El IVA y los impuestos a los combustibles aumentaron, pero no lograron equilibrar las pérdidas fiscales.