Expresidenta del PANI teme por su vida y la de su hijo; pedirá protección a Panamá
Gloriana López aseguró que recibió una “llamada hostigadora” de Casa Presidencial que complicó su estado de salud.
La exjerarca del Patronato Nacional de la Infancia (PANI), Gloriana López Fuscaldo, manifestó este domingo, por medio de su cuenta de Twitter, que tras recibir una llamada “hostigadora” por parte de Casa Presidencial teme por su vida y la de su hijo menor, por lo que pedirá protección a Panamá.
López Fuscaldo, confesó que esta situación la ha llevado al límite y que su estado de salud se ha visto afectado.
“Ocurre que recibí un ataque público y ofensivo, así como una llamada hostigadora por parte de Casa Presidencial. Esto afectó mi salud cardíaca por el estrés generado, recurrí en emergencia a la atención médica dado un evento cardíaco el viernes y dos ayer (sábado). El médico especialista me ha indicado una agresiva medicación para salvar mi vida, reposo absoluto y un monitoreo 24 hrs de mi corazón», escribió López Fuscaldo en su cuenta de Twitter que mantiene privada.
“Gracias a Dios, mi exesposo panameño, viajó desde Panamá para cuidar de nuestro hijo y por seguridad, han salido de San José desde ayer temprano. Estoy en cama con los cuidados de 2 solidarias primas y mi tía Eugenia Fuscaldo, el Dr. Federico Malavassi, me ha atendido y monitoreado todo el día de ayer, incluso hasta las 10 p.m. de ayer sábado, con una ética médica e hipocrática de la cual otros doctores deberían tomar nota. Muy agradecida. La condición médica aún no es estable, se valora la hospitalización sino respondo pronto”, agregó.
López, comentó que se acogerá a la protección de datos sensibles y no hará público el dictamen que hace constar que sufrió un quebranto en su salud.
“En 50 años me caracteriza la transparencia, sin embargo, no compartiré mi certificado médico emitido por el Dr. Malavassi, en atención a que ya mi salud ha sido objeto de diagnósticos no éticos e ilegales y me acogeré a la protección de datos sensibles, según ley nacional”, manifestó.
“Además de que deseo preservar la integridad emocional de mi hijo menor de edad. Sabrán entender. Adicionalmente, estoy solicitando protección del Gobierno panameño, ya que tengo nacionalidad panameña. Panamá se distingue por proteger a sus ciudadanos allende a sus fronteras”, recordó.
La expresidenta ejecutiva del PANI recalcó: “Tanto mi hijo menor de edad como yo, orgullosamente, somos también panameños. Dada la urgencia desde Panamá, me han enviado el teléfono del señor embajador Cabezas, a quien importunaré en domingo, dado el peligro a mi vida y la seguridad de mi hijo. Escribiré también de inmediato a la Cancillería panameña solicitando protección de ambos ciudadanos”.
“En Costa Rica ya no nos sentimos seguros. El jueves 27 me presentaré a la Asamblea Legislativa a rendir testimonio como me ha sido solicitado y el viernes saldré de Costa Rica hacia Panamá con mi hijo, en resguardo de nuestra seguridad. Sé que en Panamá estaremos seguros y confiados en un mejor futuro. Agradezco al Colegio de mi hijo (el que fue mío también) quien ha manifestado apoyo irrestricto a mi hijo, y comprensión porque dada la coyuntura, tendrá que perder lecciones. Es injusto para este chico en el retador cuarto año, pero no tenemos opción”, añadió.
En su extenso hilo, López, también envió un mensaje a los periodistas.
“Señores y señoras periodistas, ustedes respetaron mi silencio y que no di entrevistas, ni declaraciones por un mes, como me fue solicitado por Casa Presidencial cuando me coaccionaron a renunciar. Yo, mujer de palabra, no lo hice, porque además no quiero meterme en problemas con la Presidencia de la República de Costa Rica. Respeto la investidura de sus miembros y solicito lo mismo para mí, como ciudadana”.
“No hice denuncias (no era mi interés sino preservar mi salud, la salud mental de mi hijo y que recupere la paz y la alegría propia de la adolescencia -por lo demás, derecho protegido por los artículos 50 y 51 de la Constitución Política de Costa Rica y mandatos de la Convención Internacional de los Derechos del Niño) que ampara a mi hijo como costarricense, como panameño y en proceso, de acogerse también a la nacionalidad italiana por el derecho del ius sanguinis”, comentó.
En su comunicado de este domingo, López Fuscaldo también dirigió unas palabras a otros exmiembros del Consejo de Gobierno.
“Gracias a Dios por estos Estados de Derecho sólidos. Un último mensaje antes de retirarme a descansar, a los múltiples señores y señoras exministros, expresidentes ejecutivos que salieron del Gobierno actual: agradezco sus palabras de apoyo, que los represento y que fui la más valiente y todo eso. Pero respetuosamente, eso no sirve. Lo que sirve es hablar de frente, con evidencia y honrando la bandera que juraron proteger, no los juzgo, entiendo que se les han cerrado las posibilidades de conseguir trabajo dentro de Costa Rica y fuera de Costa Rica y otras cosas, que seguramente habrán vivido”.
“No los juzgo, pero entiendan que yo no represento causas políticas, yo no soy una política, ni tengo partido político, ni me guarezco para la sombra de ningún partido, hombre, ni de nadie más sino de Jesús, el valiente de los valientes y que enfrentó fariseos con voz fuerte. Como mujer, no me ostento representación de ningún grupo, pero tengo algo de experiencia en carne propia de las violencias que enfrentamos, de los machismos, de los micromachismos, del “mansexplaining” o supuesta superioridad intelectual del hombre que sobrepone su discurso al de una mujer que expresa una idea o voluntad, con frases, como, “lo que usted dice es” y repite lo que una dijo”, afirmó.
López recordó los momentos en los que “fue víctima” de maltratos en el gobierno. No solo por el presidente Rodrigo Chaves, también por diputados oficialistas.
“La frase “es decir” y repite lo que una dice, o peor aún, interrumpe, una y otra vez, con el “es decir”, que nosotras no necesitamos traductor. Con frases como “hablamos en San José” estando de gira, “hablamos luego” con un vejado machismo que busca intimidar y anunciar la próxima regañada. Es suficiente. Yo he reflexionado mucho este mes. Incluso una persona como yo, preparada y estudiada en temas del trato diferenciado por temas de género, caí en ese círculo y no lo supe ver en el momento”.
“Esto también está estudiado por la doctrina, se llama círculo de violencia. Sobre el machismo qué decir… hasta los amigos que te aprecian, lo llaman a una, para decirle, qué tiene que decir. Qué cansado. Hombres inteligentes y sensibles al tema de género, pero con profunda vivencia machista, me han dicho cómo debo hablar. Una experimentada periodista senior me escribió cómo debía hablar. La ignoré. Fui a su entrevista. Terminó para regañarme y decirme cómo expresarme. Lloré de frustración. Es que hay tanto machismo y me harté. También de familiares políticos que me subestimaron por años, me harté”, finalizó.