Celso Gamboa desea volver a invertir en fútbol; llevará franquicia de Marineros a Limón
amboa explicó que buscaran hacer un verdadero cambio en caso que se lleve a Marineros al caribe costarricense.
Desde hace varios días atrás al exmagistrado, Celso Gamboa, se le ha visto en varias fotografías posando con una camiseta del equipo Marineros de Puntarenas, de la Segunda División del Fútbol Costarricense, pero todo esto tiene un trasfondo, ya que, el abogado de profesión desea trasladar a esta institución de Puntarenas a Limón.
Cabe señalar que Limón Fútbol Club en el año 2021 descendió a la Liga de Ascenso y por una mala administración deportiva, «La Tromba» no pudo ni siquiera debutar en citada liga y el pasado viernes 11 de febrero fue enviado a la tercera división. Además, los caribeños acarreaban con una serie de deudas con la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS).
Gamboa aseguró para el Diario La Extra que se reunió con el presidente de Marineros de Puntarenas para mostrarle que es más factible tener al equipo en Limón que en Puntarenas, puesto que el arraigo que genera el Puntarenas Fútbol Club es irremplazable.
“Si usted se da cuenta, Puntarenas tiene cuatro equipos en Segunda División y todos vecinos, dos de ellos juegan en el mismo estadio. El arrastre de PFC no es el mismo que el de Marineros. Eso nos hizo acercarnos a Juan Carlos Garita, el presidente y mostrarle las ventajas que puede tener la franquicia jugando en Puerto Limón”, dijo Gamboa a Diario Extra.
Además, Gamboa explicó que buscaran hacer un verdadero cambio en caso que se lleven a los Marineros al caribe costarricense.
“Nos negamos a aceptar la muerte de Limón y buscamos esa solución desde noviembre del año pasado. Estamos analizando el modelo de negocio. Además, tanto en PFC como en Marineros están jugando muchos jugadores de la provincia de Limón. Ya las figuras de Reinaldo Parks o Carlos Pascal están un poco desgastadas y trazamos como meta provocar ese cambio”, agregó.
Por último mencionó que tratarán de formar un cuadro limonense solido, al punto que sus rivales vean el Juan Gobán como una difícil plaza de nuevo.
“Limón falleció porque se manejaba con muy buena voluntad, pero de manera muy empírica. Por más que la gente que estaba ahí lo quisiera hacer bien, no era suficiente. Se necesitaba preparación. Limón no se merece un desencuentro más, un alegrón de burro, como dicen. La idea es llevar alegría a Limón y que vuelva a ser el Juan Gobán un hervidero. Que el rival vaya perdiendo 2 a 0 con solo cruzar el Zurquí”, concluyó.