CCSS reubica a residentes del Hospital Nacional de Niños investigados por pedofilia
Mientras el caso sigue siendo investigado por el OIJ, los 3 médicos de la UCR siguen ejerciendo sus labores en otros centros médicos
Una vergonzosa situación se dio a conocer en junio anterior, luego de que tres estudiantes residentes de la Universidad de Costa Rica (UCR) que ejercían sus labores en el Hospital Nacional de Niños en la capital habían sido ligados e posibles casos de pedofilia dentro de las instalaciones del centro de salud para menores.
Sujetos compartían sus gustos por WhatsApp
Las investigaciones se argumentan en que los tres profesionales en formación reconocieran en un chat de grupo en WhatsApp que gustaban o sentían atracción sexual por niños o menores de edad, algo que prendió todas las alarmas pues su labor entonces era directa con niños del centro médico y podrían representar una seria amenaza para la integridad de los pacientes pues algunos mensajes aseguraban que les gustaban “las de 15” mientras otro respondía con un emoji babeando.
Mientras las investigaciones continúan su curso correspondiente, los tres residentes fueron reubicados en otros centros médicos para que ejerzan sus labores como si nada hubiese pasado, mientras rotan para cumplir con las horas semanales por las cuales firmaron un contrato al inicio del proceso.
CCSS asegura la integridad de los niños
“Como es un proceso actualmente en investigación, no podemos referirnos a los detalles, pero hemos hecho todo lo humanamente posible para que los pacientes pediátricos estén seguros y no corran ningún riesgo si así fuera que se probaran los hechos señalados. Este proceso tendrá que determinar la verdad o la no veracidad, mientras tanto hay que respetarle los derechos a las personas como lo establece la legislación costarricense“, expresó al medio digital CrHoy.com Mario Ruiz Cubillo, gerente médico de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
El Colegio de Médicos abrió también un expediente al respecto, mientras que la investigación oficial continúa en manos de la Sección de Delitos contra la Integridad Física, Trato y Tráfico del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).