Banco costarricense bajo la lupa: investigan supuesto blanqueo de más de $100 millones
Autoridades de Costa Rica y Panamá siguen el rastro de millonarias transacciones sospechosas
Al descubierto una presunta red de lavado transnacional
Una reciente publicación del diario La Estrella de Panamá ha encendido las alarmas en el ámbito financiero centroamericano, luego de revelar que un banco costarricense con presencia en Panamá estaría vinculado a un complejo esquema de blanqueo de capitales, en el que se habrían movilizado más de $100 millones sin justificación clara.
La investigación, que avanza bajo estricta reserva, involucra no solo movimientos bancarios de alto valor, sino también estructuras societarias que operan en ambos países.
Origen de la investigación: evasión fiscal en Costa Rica
Según el reportaje publicado por La Estrella, el caso surgió inicialmente en Costa Rica como parte de una pesquisa liderada por el Ministerio de Hacienda, enfocada en la detección de una presunta evasión fiscal superior a $10 millones.
Durante el proceso, las autoridades fiscales detectaron que el dinero habría sido canalizado a través de una red de sociedades internacionales, registradas tanto en Costa Rica como en Panamá, y que estas formarían parte de un holding empresarial, vinculado directamente al banco que facilitó las transferencias.
Movimientos millonarios bajo investigación
De acuerdo con los primeros hallazgos, las transacciones sospechosas se realizaron en el período comprendido entre marzo de 2023 y diciembre de 2024, teniendo como eje principal cuentas en la filial panameña de la entidad bancaria costarricense.
La falta de respaldo comercial para los montos transferidos y la participación de sociedades de papel levantaron las alertas que hoy mantienen en vilo a las autoridades judiciales y financieras de ambos países.
Investigación transfronteriza en curso
Las autoridades costarricenses y panameñas mantienen una coordinación conjunta para esclarecer el caso y determinar la posible participación de otros actores, tanto personas jurídicas como físicas.
Aunque hasta el momento no se han dado a conocer nombres de clientes ni detalles específicos sobre la estructura de la red, el caso ha generado preocupación sobre los controles de prevención de lavado de dinero que las entidades bancarias deben cumplir, en especial cuando operan en mercados internacionales.