Se operó los labios, le explotaron y casi queda ciega
La joven de 25 años, oriunda de Inglaterra, tuvo que ser sometida a una operación de emergencia.
Una mujer de Stockport, Inglaterra, tuvo que ser trasladada de urgencia al hospital luego de que su labio operado explotara y el pus le llegara hasta su ojo.
Jessica Myott, de 25 años, temió quedarse ciega cuando la infección alcanzó su ojo después de que le pusieran relleno en sus labios en un lugar que conoció a través de la publicidad de Instagram.
«Parecía el hombre elefante», comentó. «Estaba petrificada. Tuve que pasar cuatro días en el hospital y operarme para extirpar tres abscesos. Me quedé sufriendo ataques de pánico y mi labio superior está permanentemente entumecido».
Cuando Jessica llegó al lugar en noviembre de 2018, dijo que fue recibida por una mujer que no era la que aparecía en los anuncios, pero que no le llamó la atención. En aquel momento, pagó 487 dólares y le inyectaron tres centímetros de relleno en los labios y la mandíbula.
La joven inglesa dice que empezó a agonizar ya que su labio superior se había hinchado y le provocaba un dolor inexplicable.
“Me desperté con un dolor horrible. Envié fotos de mi labio y pedí ayuda, pero me dijeron que como era domingo, no podían verme».
Dijo Jessica cuando intentó ponerse en contacto con la clínica donde se había inyectado.
Jessica relata lo difícil que le fue encontrar ayuda para tratar su problema.
“Fui a dos clínicas sin cita previa pero no pudieron ayudar. Esa noche fui a otro hospital, donde confirmaron que tenía una infección. Me dieron antibióticos, tomé el medicamento pero me desperté en la noche sin poder respirar adecuadamente. Sabía que la infección se estaba extendiendo, así que volví»
Luego de eso fue a su casa ya que no se se tía escuchada por nadie y además dice que sintió agua en el oído debajo de su ojo comenzaba a arder tenía miedo de quedarse ciega, mientras su labio se hacía mas grande cada día.
Luego de varios días donde solo empeoraba la madre le dijo que fuera al hospital y ella cuenta que:
“Mientras estábamos allí, mi labio superior se partió. Me pusieron un goteo intravenoso para antibióticos y líquidos y me dijeron que tendría que operarme”.