Putin contra la diversidad: presidente ruso dice no aceptar los “géneros múltiples”
De esa manera y encasillado en la heteronormatividad, el mandatario ruso niega autonomía e intenta invisibilizar a las personas transgénero, transexuales y de género no binario.
El presidente Vladímir Putin afirmó que considera “inadmisible” para la sociedad rusa la existencia de “géneros múltiples”, lo que supone un rechazo a la identidad de género, percepción que cada persona tiene respecto a su propio género (coincida o no con sus características sexuales biológicas).
De esa manera, bajo la heteronormatividad, el mandatario ruso negó la autonomía de las personas transgénero, transexuales y de género no binario.
“Lo que sucede en varios países es completamente inadmisible para nosotros. Allí resulta difícil enumerar la cantidad de géneros. Ni siquiera puedo definir algunos de ellos, pero esto no tendrán lugar jamás (en Rusia), es un asunto suyo”, zanjó Putin en una videoconferencia con el Consejo para el Desarrollo de la Sociedad Civil y los Derechos Humanos.
El gobernante respondió a la intervención de la escritora Marina Ajmédova, miembro del Consejo, quien subrayó la necesidad de desarrollar una cultura ética en las redes sociales y la televisión donde abunda la agresión, las persecuciones y las estigmatizaciones sociales.
Vladímir Putin, a su vez, apuntó a que existe “una línea muy fina entre la libertad de expresión, la libertad de difusión de información (…) y la protección de nuestros valores fundamentales en los que está basado nuestra sociedad”.
“(Los rusos) tenemos nuestra propia historia, nuestra propia cultura, y aquí la palabra clave es cultura (…). Urge desarrollar la cultura profesional y el autocontrol en determinados entornos”, apuntilló, según recogió un comunicado del Kremlin este viernes 11 de diciembre.
Amenaza a la diversidad
Activistas y organismos internacionales LGBTI+ han advertido que el concepto de heteronormatividad contribuye a los prejuicios y la opresión basada en la homofobia y el sexismo.
Al normalizar este concepto, se deja fuera a quienes que no cumplen con estas expectativas y se les estigmatiza como “anormales” o “antinaturales”, según se desprende del ensayo “Género, cuerpo y heteronormatividad: reflexiones desde la antropología”, escrito por María Belén Vásquez Santibáñez y Ana María Carrasco Gutiérrez.