Nayib Bukele ofrece pasaporte salvadoreño a 5 mil extranjeros cualificados
A los extranjeros “altamente cualificados” que decidan tomar el pasaporte de El Salvador, el gobierno les ofrece facilitar su reubicación “garantizando 0% de impuestos y aranceles sobre el traslado de familias y activos”.
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ofreció este sábado 5.000 pasaportes a “extranjeros altamente cualificados” como científicos o filósofos que se instalen en el país, y quienes podrán optar a la ciudadanía salvadoreña.
“Estamos ofreciendo 5.000 pasaportes gratuitos”, indicó el mandatario en su cuenta en la red social X.
Los pasaportes son ofrecidos “a científicos, ingenieros, médicos, artistas y filósofos altamente cualificados del extranjero”, agregó.
“Esto representa menos del 0,1% de nuestra población, por lo que otorgarles el estatus de ciudadanos plenos, incluido el derecho al voto, no plantea ningún problema”, dijo Bukele.
A los extranjeros “altamente cualificados” que decidan tomar el pasaporte de El Salvador, el gobierno les ofrece facilitar su reubicación «garantizando 0% de impuestos y aranceles sobre el traslado de familias y activos», que incluyen «artículos de valor comercial como equipos, software y propiedad intelectual».
“A pesar del pequeño número, sus contribuciones tendrán un enorme impacto en nuestra sociedad y el futuro de nuestro país”, sostuvo Bukele, y anticipó que en el futuro dará «más detalles».
El nuevo periodo presidencial de Bukele
Bukele, que asumió como presidente de El Salvador en junio de 2019, resultó reelecto para un nuevo período de cinco años en las elecciones del pasado 4 de febrero, en las que obtuvo el 84,65% de la votación, favorecido por su cruzada contra las pandillas.
Tras arrinconar a las pandillas, Bukele ha dicho que en su nuevo período presidencial que arrancará el próximo 1 de junio, los esfuerzos de su gobierno estarán centrados en empujar una mejora en la economía.
Por otro lado, pese a las bajas cifras de delincuencia en el país, el gobierno de Bukele ha sido cuestionado por organismos de derechos humanos que critican el régimen de excepción pues denuncian «detenciones arbitrarias», «torturas» y «muertes» en prisión.