Crisis en Gaza: OMS denuncia el colapso humanitario como “una abominación”
Alarma internacional por la situación en la Franja: sin ayuda, sin alimentos y con miles de vidas en riesgo
La Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzó una dura advertencia sobre el estado crítico que atraviesa la población civil en Gaza. A casi dos meses del bloqueo impuesto por el ejército israelí, la comunidad internacional asiste a lo que el organismo ha calificado como “una abominación” humanitaria.
Mike Ryan, director ejecutivo de emergencias sanitarias de la OMS, no ocultó su indignación en una reciente conferencia de prensa. Con un tono directo y sin rodeos, cuestionó la parálisis de los actores globales ante el sufrimiento de los civiles:
“Estamos destrozando el cuerpo y el alma de los niños de Gaza. Los estamos matando de hambre. Si no actuamos, nos convertiremos en cómplices de esta tragedia”, afirmó.
Ayuda bloqueada y hambre creciente: una bomba humanitaria en curso
Desde el 7 de octubre, cuando el movimiento islamista Hamás perpetró ataques contra Israel y secuestró a 251 personas, las tensiones han escalado hasta derivar en un cerco casi total sobre Gaza. Según el ejército israelí, de los secuestrados aún permanecen 58 en cautiverio, 34 de ellos fallecidos.
En respuesta, el gobierno israelí ha restringido severamente el ingreso de ayuda humanitaria, combustible, alimentos y medicamentos. A pesar de los llamados internacionales al cese de estas medidas, la situación se ha agravado de forma alarmante.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) anunció recientemente que ha agotado sus reservas, dejando sin sustento a millones de personas. Con 2,4 millones de habitantes atrapados entre el fuego cruzado y el desabastecimiento, el riesgo de hambruna masiva se convierte en una amenaza inminente.
El silencio global y la pregunta que incomoda
“¿Cuánta sangre más se necesita para satisfacer los intereses políticos?”, cuestionó Mike Ryan, señalando directamente la responsabilidad compartida de los actores internacionales.
El mensaje de la OMS pone en tela de juicio no solo la gestión del conflicto por parte de Israel y Hamás, sino también la tibieza de la comunidad internacional frente a lo que organizaciones de derechos humanos describen como un colapso ético y sanitario.
Una población atrapada entre la guerra y el abandono
El informe de la ONU advierte que Gaza se encuentra al borde de una catástrofe total: hospitales colapsados, infraestructuras destruidas y niños muriendo no solo por ataques, sino también por desnutrición y enfermedades prevenibles.
“La respuesta internacional ha sido, en el mejor de los casos, insuficiente”, se lee en un comunicado reciente del organismo. Mientras tanto, la población civil paga el precio más alto de un conflicto en el que cada día hay menos espacio para la esperanza.