Tong Tong, la niña robot de Inteligencia Artificial que tiene ‘emociones’: así funciona
Según sus creadores, Tong Tong tiene la capacidad de mostrar emociones como alegría, ira y pena.
En un emocionante avance tecnológico, durante el presente año 2024, fue presentada en la exposición ‘Fronteras de la Inteligencia Artificial General’ en Pekín, China, la primera niña desarrollada con inteligencia artificial (IA) bautizada como Tong Tong. Este innovador proyecto, creado por el Instituto de Inteligencia Artificial General de Pekín (BIGAI), ha capturado la atención del mundo al afirmar que Tong Tong posee la inteligencia emocional y el comportamiento típicos de un niño de tres o cuatro años.
El desarrollo de Tong Tong representa un hito en la evolución de la inteligencia artificial, ya que no solo es capaz de aprender de manera autónoma, sino que también puede asignarse tareas, interpretar las intenciones humanas y mostrar emociones como alegría, ira y tristeza. A diferencia de los modelos de lenguaje grande (LLM) convencionales, Tong Tong se distingue por su capacidad para actuar de manera autónoma y autoasignarse tareas.
Aunque la tecnología LLM ha demostrado su capacidad para entrenarse sin supervisión y comprender una variedad de datos, la verdadera novedad de Tong Tong radica en su capacidad para discernir entre el bien y el mal, expresar sus actitudes en diferentes situaciones y moldear su propio futuro. Según el instituto BIGAI, Tong Tong posee una mente propia y se esfuerza por comprender el sentido común enseñado por los humanos.
Es importante destacar que Tong Tong existe y opera en un entorno virtual, lo que significa que no tiene una forma física tangible. Sin embargo, los visitantes de la exposición tuvieron la oportunidad de interactuar con ella y asignarle tareas. Durante estas interacciones, se observó cómo Tong Tong respondía de manera autónoma a diversas situaciones, como limpiar un derrame de leche sin necesidad de instrucciones previas.
Aunque aún no se ha determinado si Tong Tong es un agente completamente autónomo, sus creadores afirman que posee una mayor independencia que otras inteligencias artificiales. En este sentido, el director de BIGAI, Zhu Songchun, presentó el test de Tong, diseñado para evaluar la capacidad de las entidades de IA para comprender el mundo real y ejecutar tareas en entornos complejos basados en valores y una comprensión de la causalidad. Este test busca reemplazar a la famosa prueba de Turing y representa un paso significativo hacia el desarrollo de una inteligencia artificial más avanzada y adaptable a las necesidades del mundo moderno.