Presionado por EEUU, Israel promete aumentar la ayuda humanitaria a Gaza
El consejo de Derechos Humanos de la ONU exigió además este viernes el cese de la venta de armas a Israel.
Redacción
Publicado: abril 5, 2024
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, hizo público el jueves su interés en condicionar el apoyo a Israel a medidas específicas y mensurables para abordar la crisis humanitaria en Gaza, marcando un giro significativo en la postura del país hacia el conflicto en la región.
En respuesta, el gabinete de seguridad de Israel aprobó rápidamente medidas inmediatas para aumentar la entrada de ayuda humanitaria a la población civil en Gaza. Estas acciones fueron anunciadas por la oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu el viernes.
Washington expresó su expectativa de ver resultados concretos en los próximos días y semanas, según declaraciones del secretario de Estado Antony Blinken. Se busca garantizar que la ayuda llegue de manera efectiva a la gran mayoría de la población en Gaza que enfrenta dificultades.
Israel ha acordado permitir un acceso temporal para la ayuda a través del puerto de Asdod y el paso de Erez en el norte del enclave, así como un aumento en la ayuda proveniente de Jordania a través del paso de Kerem Shalom en el sur del territorio palestino.
El conflicto se intensificó después del letal ataque de Hamás en suelo israelí, desencadenando una guerra que ha cobrado la vida de numerosos civiles. Israel lanzó una ofensiva aérea y terrestre en Gaza con el objetivo de «aniquilar» a Hamás, lo que ha resultado en una devastación considerable en la región.
En medio de la escalada de violencia, Biden instó a Netanyahu a buscar un alto el fuego con Hamás, especialmente en el contexto de una posible operación terrestre israelí en Rafah, donde miles de personas han sido desplazadas por los combates.
El Consejo de Seguridad de la ONU celebrará una reunión este viernes para discutir la situación de los trabajadores humanitarios en Gaza y el riesgo de hambruna en el territorio, tras la muerte de siete cooperantes de la oenegé World Central Kitchen en un bombardeo israelí.
La tragedia ha generado críticas internacionales y ha llevado a la suspensión de operaciones de organizaciones humanitarias en Gaza, debido a las dificultades y riesgos asociados con la prestación de asistencia en la región.
