Presidente de Cuba advierte que no tolerará protestas en el país por los apagones
En medio de otro cacerolazo nocturno en la capital y un corte masivo de electricidad que llegó a su tercer día consecutivo, el gobernante de Cuba, Miguel Díaz-Canel, amenazó con procesar a quienes reclamen.
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, emitió una advertencia enérgica el domingo, afirmando que actuará con «rigor» contra quienes intenten alterar el orden público en medio de un apagón que ha dejado a la isla a oscuras durante tres noches consecutivas. Durante una reunión de gobierno transmitida por el Noticiero Estelar, Díaz-Canel, vestido con uniforme militar, declaró que aquellos involucrados en actos vandálicos o provocaciones serían «procesados como corresponde con el rigor que contemplan las leyes revolucionarias». Atribuyó algunos de estos actos a «operadores de la contrarrevolución cubana desde el exterior».
Mientras tanto, en varios barrios de La Habana, se llevaron a cabo cacerolazos y manifestaciones de descontento por la falta de electricidad. Residentes de áreas como Santos Suárez y Centro Habana se quejaron de la situación, expresando su frustración por la duración del apagón y los problemas que esto ha causado en sus hogares, incluyendo la posible pérdida de alimentos.
En medio de esta crisis energética, el huracán Oscar golpeó el extremo oeste de la isla, generando olas de hasta cuatro metros y causando daños en estructuras y caída de postes y árboles. El huracán, que tocó tierra cerca de Baracoa, mantenía vientos sostenidos de 130 kilómetros por hora.
Las autoridades reconocieron que la situación eléctrica sigue siendo «compleja» y anunciaron que esperaban restablecer el servicio para la mayoría de la isla el lunes por la noche. Sin embargo, tras un breve restablecimiento, se registró otra falla en el sistema eléctrico nacional, lo que llevó a la suspensión de clases y actividades laborales no esenciales hasta el miércoles. Solo los hospitales y servicios vitales continuarían operando durante este tiempo.