Mujer pierde ambas piernas por «shock tóxico» de un tampón
La modelo identificada como Lauren Wasser, asegura que cambiaba regularmente sus tampones, pero aún así fue afectada por el síndrome.
Redacción
Publicado: mayo 13, 2024
Una trágica experiencia llevó a Lauren, ahora con 36 años, a desmitificar una creencia arraigada sobre el shock tóxico. Contrario al mito de que este trastorno surge por dejar puestos los tampones durante períodos prolongados, ella reveló que puede ocurrir incluso con un uso adecuado.
En una entrevista en el podcast Life Uncut, Lauren compartió una perspectiva reveladora: «La gente cree que son invencibles, pero nadie está exento. El shock tóxico puede afectar a cualquiera en cualquier momento».
Lauren señaló que muchos tampones, aunque se promocionen como 100% de algodón, están «rociados con pesticidas». Esta revelación plantea interrogantes sobre la seguridad de los productos de higiene femenina.
«Al insertar un tampón en un momento tan delicado, creamos una tormenta perfecta. Basta con una de esas toxinas para entrar en el cuerpo y desencadenar una reacción mortal», advirtió.
Su experiencia ha forjado un compromiso: difundir información vital y fomentar conversaciones entre mujeres para que se cuiden mutuamente. Lauren enfatizó que el conocimiento es fundamental para la prevención.
El día del incidente, Lauren fue encontrada al borde de la muerte en su departamento. Tras ser llevada de urgencia al hospital, sufrió dos paros cardíacos y fue inducida a un coma mientras sus órganos fallaban.
Diagnosticada con síndrome de shock tóxico, enfrentó una batalla por su vida. Aunque lograron salvarla, la gangrena causó daños irreparables en sus extremidades, lo que resultó en la amputación de su pierna derecha y otros miembros.
Los síntomas del shock tóxico, como fiebre alta y confusión, pueden confundirse con otras enfermedades. Es más común en mujeres que usan tampones, afectando a aproximadamente una de cada 100,000 cada año.
La historia de Lauren subraya la importancia de la conciencia sobre el shock tóxico y destaca la necesidad de una mayor educación sobre la seguridad de los productos de higiene femenina.
