Es multimillonario y huyó de Rusia: Quién es Pavel Durov, el CEO de Telegram detenido

Pavel Durov Arrestado en París: Un Nuevo Capítulo en la Controversia de Telegram

Pavel Durov, el multimillonario fundador y director ejecutivo de Telegram, fue arrestado el sábado en el aeropuerto de Bourget, en las afueras de París, mientras viajaba desde Azerbaiyán a bordo de su avión privado. Durov, quien es una figura destacada en el mundo de la tecnología y fundador de una de las aplicaciones de mensajería más influyentes, enfrenta una investigación preliminar en Francia relacionada con la moderación de contenido en Telegram.

La fortuna de Durov está valorada en 15,5 mil millones de dólares según Forbes, y su aplicación de mensajería cuenta con aproximadamente 900 millones de usuarios activos. Telegram, conocida por su enfoque en la privacidad y la libertad de expresión, ha sido especialmente influyente en Rusia, Ucrania y las repúblicas de la antigua Unión Soviética.

La empresa, con sede en Dubái, fue creada por Durov, quien dejó Rusia en 2014 después de negarse a cumplir con las demandas del gobierno para cerrar grupos de oposición en su plataforma. Desde entonces, Durov ha estado en el centro de varias controversias debido a su compromiso con la privacidad y la libertad en línea.

La investigación en Francia parece centrarse en la falta de moderadores en Telegram, lo que, según la policía, podría haber permitido la proliferación de actividades criminales a través de la aplicación. Este arresto marca un nuevo capítulo en las dificultades legales que Durov ha enfrentado a lo largo de su carrera, reflejando la continua tensión entre la regulación de contenidos en línea y la protección de la privacidad del usuario.

Historia Personal y Profesional de Durov

Pavel Durov nació el 10 de octubre de 1984 en Rusia y posee doble nacionalidad francesa y rusa. Pasó parte de su niñez en Italia antes de regresar a Rusia para estudiar filología en la Universidad de San Petersburgo. En sus primeros años, Durov desarrolló varios proyectos tecnológicos, incluyendo durov.com, una plataforma para compartir libros y archivos académicos, y VK (VKontakte), una red social que fundó y que se convirtió en una de las principales en Rusia.

Durov se convirtió en una figura polémica en 2014 cuando se negó a entregar datos de manifestantes ucranianos a las agencias de seguridad rusas, lo que llevó a su despido como CEO de VK. Posteriormente, vendió sus participaciones en la empresa y se trasladó fuera de Rusia, afirmando que el entorno en el país era incompatible con su visión de la tecnología y los negocios en línea.

La reciente detención de Durov en París resalta las tensiones persistentes en torno a la regulación de plataformas digitales y el papel de los responsables de estas en la moderación de contenido. Mientras tanto, el caso de Durov continúa siendo un punto de referencia en el debate sobre la libertad en internet y la responsabilidad de las plataformas de redes sociales.