El zoólogo Adam Britton es condenado a más de 10 años de cárcel por maltrato animal: Torturó, violó y asesinó a decenas de perros
El sujeto de 53 años trabajó en producciones de la BBC y de National Geographic, incluso recibió a David Attenborough en su casa de Darwin, Australia, siendo reconocido como uno de los mayores expertos en cocodrilos del mundo.
Condena Ejemplar para el Zoólogo Británico Adam Britton por Maltrato Animal y Delitos Sexuales
El zoólogo británico Adam Britton, de 53 años, ha sido condenado a más de diez años de prisión tras ser hallado culpable de graves crímenes que incluyen maltrato animal y posesión de material pornográfico infantil. El caso ha conmocionado a la comunidad científica y a la opinión pública debido a la naturaleza perturbadora de los delitos cometidos por el ex experto en cocodrilos.
Britton, quien anteriormente colaboró con la BBC y National Geographic, y recibió al famoso naturalista David Attenborough en su hogar de Darwin, Australia, fue acusado de torturar, violar y asesinar a numerosos perros. La condena, dictada por el juez Michael Grant del Tribunal Supremo del Territorio Norte el pasado 8 de agosto de 2024, impone a Britton una pena de diez años y cinco meses de cárcel.
Según informes de LBC, Britton comenzó a perpetrar estos actos atroces en 2014. Utilizaba su posición y conocimiento en zoología para atraer a los animales, que supuestamente recibían refugio en su hogar en la laguna McMinns, una fachada para sus verdaderas intenciones. Los perros que los propietarios le confiaban acababan siendo víctimas de su sádico interés sexual, y los abusos se documentaban en videos que Britton publicaba en internet bajo identidades falsas.
El modus operandi de Britton consistía en engañar a los dueños de los perros al proporcionarles fotos antiguas de los animales, tomadas antes de que fueran torturados o asesinados. Su principal herramienta para compartir el material era una cuenta de Telegram encriptada, donde distribuía los videos grabados en un container que había adaptado como sala de torturas.
La investigación que llevó a su arresto en abril de 2022 se inició tras el envío de uno de estos registros a las autoridades australianas. Un año después, Britton se declaró culpable de al menos 60 delitos relacionados con el maltrato animal, que incluyeron tortura, violación y asesinato de 42 perros, de los cuales 39 murieron a causa de sus abusos.
La condena de Britton ha sido descrita como una medida necesaria para hacer justicia por los horrores cometidos, y su caso ha resaltado la urgencia de mecanismos más efectivos para prevenir y castigar el maltrato animal. La noticia ha dejado a la comunidad zoológica y al público en general atónitos, reflexionando sobre las profundidades de la crueldad humana y la necesidad de protección para los animales.