Dominique Pelicot: «Soy un violador y ahora debo pagar»
La esposa de Dominique Pelicot, abusada por varios hombres, declaró en el juicio: «Amé a este hombre durante 50 años. Habría puesto mis dos manos en el fuego por él». El sujeto aceptó su culpabilidad.
Dominique Pelicot explicó este martes 17 de septiembre, en el proceso de Aviñón en el que está acusado de haber drogado durante casi diez años a su mujer para violarla y que lo hicieran decenas de hombres, que tenía «la familia ideal», pero que con su comportamiento lo ha «arruinado todo» y ahora debe «pagar».
Se arrepiente de lo que hizo y haber dañado su familia
Pelicot, que reconoció ser plenamente responsable de los delitos por los que está encausado, se mostró avergonzado por su comportamiento en la vista, en presencia de Gisèle Pelicot, la que ha sido su mujer durante medio siglo, y de la que se divorció en agosto: «Lo he arruinado todo y lo he perdido todo. Tengo que pagar».
Destacó que tenía «la familia ideal, pero yo no lo era», y trató de explicar sus prácticas de grabar las violaciones cometidas por las decenas de hombres a los que invitaba a su casa para que abusaran de su mujer, que estaba bajo los efectos de los ansiolíticos: «Hay una parte de placer, pero también una medida de seguro».
Porque, según afirmó, «gracias» a esos archivos audiovisuales, con cientos de videos y fotos que la Policía encontró en un disco duro se ha podido identificar «a los que participaron en todo eso».
«Soy un violador como todos los que están en esta sala»
Se refería así a los que se sientan con él en el banquillo, 49 hombres acusados de haber violado a Gisèle Pelicot, y otro, Jean-Pierre Maréchal, que copió los métodos de Dominique Pelicot y drogó también a su propia esposa para violarla con el que le servía de ejemplo.
«Soy culpable de lo que hice. Ruego a mi mujer, a mis hijos, a mis nietos, a la señora M. [esposa de otro acusado a la que también habría violado] de aceptar mis disculpas. Pido perdón aunque esto no sea algo aceptable», agregó.
«Ella era maravillosa», declaró, mientras la mujer lo miraba fijamente en el tribunal, constató un periodista de la AFP. «La amé 40 años y la amé mal 10 años. Nunca debí hacer eso. Lo arruiné todo. Perdí todo. Debo pagar por ello», agregó.
Ese comentario generó algunos murmullos en la sala entre los acusados.
Béatrice Zavarro, la abogada del principal acusado en este proceso ante el Tribunal de lo Criminal de París, trató de poner en contexto esta primera declaración de su cliente.
«Lo que cometió es incontestablemente un acto monstruoso. ¿Es un monstruo? No estoy de acuerdo con eso y me dedicaré a demostrarlo. En cualquier caso, es un hombre entre los hombres», añadió la defensa del acusado.
La letrada también hizo hincapié en la voluntad de Dominique Pelicot de contarlo todo, de forma que este asunto no tenga ninguna parte oculta.
Pelicot, de hecho, aseguró que no cometió otros actos de abusos más allá de los que ha descubierto la Policía.
Indicó que él también sufría por ver los abusos que padecía su mujer y que trató de parar, «pero la adicción era más fuerte».
Al inicio de su declaración el principal acusado había contado que cuando tenía 9 años él mismo sufrió abusos sexuales en un hospital, que presenció una violación con 14 años y que lo intentaron hacer partícipe de los abusos que sufría su madre de parte de su padre.
Estableció un vínculo con los hechos por los que está siendo juzgado: «Uno no nace perverso, se hace».
Lo que dijo la esposa del sujeto
«Ni por un solo segundo dudé de este hombre» en el que «confiaba plenamente», explicó Gisèle Pelicot. «Amé a este hombre durante 50 años. Habría puesto mis dos manos en el fuego por él», agregó.
Gisèle Pelicot, la principal víctima de 71 años, «no merecía eso», afirmó el principal acusado en el proceso, antes de reaccionar a las declaraciones de su ya exesposa, a instancias del tribunal.