Denuncian en EEUU a concursos de belleza por reglas «discriminatorias» contra madres
¿Por qué una joven madre casada no puede participar en concursos de belleza como Miss America o Miss Mundo?
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¿Por qué una joven madre casada no puede participar en concursos de belleza como Miss America o Miss Mundo?
Madres y Concursos de Belleza: La Lucha de Danielle Hazel por la Inclusión
En el mundo de los concursos de belleza, como Miss America y Miss Mundo, una cuestión fundamental ha surgido a la luz: ¿por qué las madres casadas no pueden participar? Danielle Hazel, una joven madre de Nueva York, está decidida a cambiar esta realidad que considera «estúpida» y «discriminatoria», y ha llevado su batalla a la Comisión de Derechos Humanos de Nueva York.
Una Regla Controversial con Décadas de Historia
Desde hace más de 70 años, los concursos de belleza han mantenido reglas que excluyen a mujeres que son madres, están embarazadas o casadas. Esta normativa no solo limita las oportunidades para muchas mujeres talentosas, sino que también perpetúa un estereotipo anticuado sobre la feminidad y la belleza. Danielle Hazel, acompañada por su hijo de seis años, ha alzado su voz para desafiar esta normativa que le ha impedido cumplir su sueño de participar en estos certámenes.
El Apoyo Legal y la Lucha por la Inclusión
La abogada Gloria Allred, quien representa a Hazel, ha criticado estas normas, argumentando que «estar embarazada o ser madre no es un delito» y que tales requisitos deberían ser revisados. Allred, en una conferencia de prensa realizada frente al monumento Pioneras de los Derechos de la Mujer en Central Park, destacó que la maternidad no debería excluir a una mujer de oportunidades profesionales o comerciales.
Un Problema Global
La lucha de Hazel no es un caso aislado. Veronika Didusenko, quien fue Miss Ucrania en 2018, también experimentó la discriminación de primera mano. Didusenko fue despojada de su título de Miss Ucrania cuando se descubrió que era madre, lo que la llevó a fundar la organización #DerechoaSerUnaMadre para combatir la exclusión de las madres en el ámbito de los concursos de belleza.
El Impacto y la Posibilidad de Cambio
Hazel y Didusenko argumentan que, si estos concursos adoptaran una postura más inclusiva, podrían convertirse en una poderosa plataforma de empoderamiento para mujeres de diversos antecedentes y situaciones personales. «Los concursos inclusivos pueden ser una fuente de empoderamiento para las mujeres y han lanzado carreras para muchas», subrayan.
La creciente presión pública y la acción legal podrían significar un cambio en estas normativas desfasadas, ofreciendo nuevas oportunidades para las mujeres que desean combinar su rol de madre con la participación en concursos de belleza. Esta iniciativa no solo busca abrir puertas para futuras participantes, sino también desafiar y redefinir los estándares de belleza y éxito en el siglo XXI.