Asesinan a directora de la cárcel más grande y poblada de Ecuador: hay también un herido
Medios locales señalan que María Daniela Icaza, directora de la Penitenciaría del Litoral, se movilizaba entre Daule y Guayaquil cuando hombres armados interceptaron el vehículo y le dispararon.
El asesinato de María Daniela Icaza, directora de la Penitenciaría del Litoral, la prisión más grande de Ecuador, ha generado una nueva ola de consternación en el país. El atentado ocurrió la tarde del jueves 12 de septiembre, cuando Icaza fue emboscada y atacada mientras se dirigía al Hospital del Guasmo Sur, en la ciudad de Guayaquil. Un funcionario penitenciario que la acompañaba también resultó herido en el ataque, que se produjo en la carretera entre Daule y Guayaquil.
Según informes iniciales, Icaza, quien iba en el asiento del copiloto, fue trasladada con vida al hospital, pero horas después se confirmó su fallecimiento. Este trágico suceso marca el segundo asesinato de un director de prisión en menos de diez días, luego de que el 3 de septiembre fuera asesinado Álex Guevara, director de la cárcel de Lago Agrio, en circunstancias similares.
La Penitenciaría del Litoral, oficialmente conocida como Centro de Privación de Libertad Masculino Guayas Número 1, alberga a más de 6.000 presos y forma parte de un complejo penitenciario de Guayaquil donde están recluidos alrededor de 12.000 internos. Esta prisión ha sido escenario de algunos de los episodios más sangrientos en la historia penitenciaria de Ecuador, debido a violentos enfrentamientos entre bandas criminales que luchan por el control interno.
Entre 2021 y 2023, la Penitenciaría del Litoral fue el centro de varias masacres, que dejaron un saldo devastador. La situación obligó al presidente Daniel Noboa a decretar la militarización de las prisiones a comienzos de 2023, en el marco de un estado de excepción y un «conflicto armado interno» contra el crimen organizado. A pesar de estos esfuerzos, el asesinato de Icaza y otros líderes penitenciarios refleja la magnitud del desafío que enfrenta Ecuador.
El auge de la violencia ha convertido al país en uno de los más peligrosos de América Latina, con una tasa alarmante de homicidios de 47,2 por cada 100.000 habitantes en 2023. Esta oleada de violencia ha cobrado la vida no solo de funcionarios penitenciarios, sino también de autoridades municipales y nacionales, como varios alcaldes y el candidato presidencial Fernando Villavicencio, asesinado durante su campaña electoral.
Este nuevo atentado ha puesto de relieve la urgencia de abordar el creciente problema del crimen organizado en Ecuador, donde el control de las cárceles y las calles se ha convertido en una batalla abierta entre el Estado y las bandas criminales.