“Mira quién baila”: a los rumores de votaciones manipuladas se le suma otro: montajes. Vea lo que dijo Michael Rubí
El drama parece no dar tregua en el reality de Teletica Mira quién baila. A los rumores de votaciones manipuladas que surgieron tras la polémica eliminación de Berny Madrigal, ahora las redes sociales hierven con acusaciones contra Michael Rubí. Al bailarín se le señala de criticar duramente a sus parejas de baile.
El escándalo comenzó cuando se filtró un video en el que Rubí calificó como “agotador” trabajar con su antigua compañera Janeth García: “El hecho de trabajar con una persona que no sabe bailar y hay que enseñarle todas las semanas… uff, es durísimo. Yo no sé si pueda volver a hacer esto”, comentó.
Pero el verdadero golpe llegó cuando el medio La Esquina 506 publicó una captura de pantalla supuestamente atribuida a Rubí, donde criticaba a Lynda Díaz, su actual compañera: “Es demasiado tiesa, aparte que es bien vaga y de todo se queja. Su marido quiere estar en todo sapeando, no le da espacio y es incómodo estarlo escuchando”.
Harto de las acusaciones, Rubí salió al frente con un contundente video en redes sociales para aclarar su postura y desmentir categóricamente la autenticidad de la captura.
“Eso es un montaje. Alguien sacó bastante tiempo para inventar algo así y tratar de dañarme, pero no lo están logrando ni lo lograrán. Esas palabras no salieron de mí, ni siquiera las uso en mi vocabulario. Quien me conoce sabe que yo jamás sería capaz de decir esas cosas”, afirmó.
Michael también insinuó que alguien dentro de la producción podría estar detrás de esta campaña en su contra, aunque prefirió no dar nombres: “Más o menos sé quién está detrás de esto, pero yo creo en que cuando uno está agarradito de la mano de Dios, todo sale a la luz”.
Además, aprovechó para defender su relación con Janeth García: “Si yo hubiera tratado a Janeth como dicen, no tendríamos la relación de amistad que tenemos ahora”.
Y, en cuanto a Lynda Díaz, aseguró que la respeta profundamente: “Ella se ha esforzado muchísimo y ha hecho un gran trabajo durante esta semana. Me parece muy injusto que también estén tratando de dañar su imagen”.
Aunque Rubí se mostró firme y optimista, el público sigue dividido. Mientras algunos le creen, otros no dejan de cuestionar la transparencia del programa.
¿Montajes, conspiraciones internas o simple mala suerte? Lo cierto es que Mira quién baila está en el ojo del huracán, y parece que el drama no acabará pronto.