¿Secuestro al fútbol? Tigo Sports podría tener la transmisión exclusiva de la mitad del campeonato
Mayoría de aficionados podrían ser imposibilitados de ver más de 66 partidos para la próxima temporada.
El fútbol nacional viene en constante desarrollo y parte fundamental de ello ha sido el orden financiero y organizacional que han asumido los clubes dada la exposición que se les da a nivel televisivo, incluso trascendiendo fronteras, pero esto se vería afectado.
La entrada en operación del canal Tigo Sports en cooperación con la compañía televisora mexicana Multimedios provocó que las audiencias en televisión para muchos equipos se redujeran significativamente y golpeara a muchos aficionados.
En dos años, Tigo ya es el canal con más equipos
Tras el anuncio de que ahora Tigo transmitirá en exclusiva los partidos de Guadalupe F.C, ahora la empresa suma 5 equipos en primera división, pues el torneo anterior tenía los derechos televisivos de Herediano, San Carlos, Santos de Guapiles y la UCR.
Como si fuese poco, la misma empresa también tiene los derechos de Jicaral Sercoba, equipo que actualmente pelea la gran final por ascender a la primera división y cuentan con grandes posibilidades de ganar la serie ante Guanacasteca.
En caso de que Jicaral sea el equipo que ascienda a la máxima categoría, Tigo Sports tendrá los derechos en exclusiva de transmitir los partidos de la mitad de los equipos de la primera división, lo que significa que de los 132 partidos de la fase regular ellos transmitirán 66 encuentros exclusivamente a sus clientes (de mantenerse el mismo formato del campeonato).
Canales tradicionales pierden terreno
Teletica y Repretel, quienes transmiten sus partidos en señal abierta, van perdiendo terreno. Los del canal de la sabana tienen los derechos del Saprissa (mayor audiencia a nivel nacional e internacional), Cartaginés y Pérez Zeledón; mientras los del 6 se quedan con Alajuelense, Limón y Grecia.
Todo esto podría ser un arma de doble filo para los equipos, quienes por un lado reciben un monto mayor por los derechos de transmisión pero sus patrocinadores podrían dejarlos a tener un alcance de población significativamente menor.