¿Qué llevan los astronautas en sus mochilas?
Además de su maleta, los astronautas usan un traje espacial que se asemeja a una pequeña nave diseñada para un único ocupante. Conozca a detalle qué es lo que cargan.
La atención de muchos se ha dirigido hacia la variedad de herramientas que los astronautas utilizan para garantizar su supervivencia durante su estancia en el espacio. Esta curiosidad ha generado interrogantes acerca de los elementos que podrían llevar consigo y de cómo logran sobrevivir en esos días. En este contexto, es fundamental profundizar en el conocimiento del traje espacial, entendiendo qué elementos son esenciales para determinar qué pueden llevar tanto en su equipo como en la mochila.
La relevancia del traje espacial radica en que es esencialmente una pequeña nave diseñada para un solo ocupante. Dado que este entorno únicamente puede sostener la vida de una persona, o en su defecto, de un solo astronauta, el traje espacial se caracteriza por su volumen y rigidez. Estas características son necesarias para mantener una precisión constante en el entorno interior y garantizar las condiciones vitales necesarias.
Ante esta necesidad, la espaciosa mochila de un astronauta cumple la función de albergar un sistema de soporte vital encargado de regular los niveles de oxígeno y eliminar el dióxido de carbono generado al respirar. Este sistema, conocido como Subsistema Primario de Soporte Vital, PLSS (siglas en inglés) contiene el oxígeno que los astronautas inhalan fuera de la nave y también suministra electricidad al traje.
Por esa razón, los astronautas llevan consigo un ventilador que facilita la circulación del oxígeno, mientras que un depósito contiene agua refrigerada que fluye a través del traje unido al cuerpo de los astronautas, manteniendo su temperatura corporal en el gélido entorno del espacio.
Además, la mochila puede incluir un dispositivo denominado Sistema de Auxilio Simplificado para rescate en actividades extravehiculares (SAFER, por sus siglas en inglés). Este sistema cuenta con propulsores pequeños situados en diversas áreas. En caso de que un astronauta se desvincule de la Estación Espacial Internacional o de su vehículo, puede utilizar el SAFER para regresar.
¿Cómo se llama el traje del astronauta?
El traje convencional de astronauta, conocido como EMU (Unidad Extravehicular Móvil en español) se emplea cuando es necesario realizar salidas de la nave espacial o de la Estación Espacial Internacional para explorar superficies o llevar a cabo reparaciones externas en sondas espaciales o en la propia nave.
¿Cómo son fabricados los trajes espaciales?
Un traje espacial se presenta en tono blanco con el propósito de reflejar los rayos del Sol y prevenir el sobrecalentamiento. Este consta de 14 capas de diversos materiales, como nylon, aluminio y neopreno. Las tres capas internas (de adentro hacia afuera) están diseñadas para regular la temperatura, mientras que la cuarta capa se encarga de mantener la presión interna del traje.
¿Qué pasaría si los astronautas no utilizan todos estos elementos?
La necesidad urgente de utilizar un traje espacial para garantizar la supervivencia en el espacio es incuestionable. Sin embargo, surge la interrogante acerca del destino de un cuerpo humano sin vida en el vacío cósmico. Contrario al proceso convencional de descomposición en la Tierra, la falta de oxígeno en el espacio plantea una realidad única para el mantenimiento del cuerpo humano después del deceso.
¿Qué no puede faltar en el traje de un astronauta?
Como se ha destacado anteriormente, la pieza fundamental del traje del astronauta es la mochila, específicamente el Subsistema de Soporte Vital Primario (PLSS). Este componente es esencial y cumple funciones críticas para garantizar la seguridad y el bienestar de los astronautas. Su alcance abarca diversas áreas del cuerpo y del equipo, desempeñando un papel crucial en la ejecución exitosa de las misiones espaciales:
- Parte superior del torso.
- Cobertura del torso superior.
- Torso inferior.
- Brazos.
- Guantes.
- Casco.
- Módulo de control y pantallas.
Este sistema integral asegura la provisión adecuada de soporte vital durante las misiones espaciales.