Cada año, el 21 de marzo, muchas parejas y amigos intercambian flores amarillas como símbolo de amor, esperanza y felicidad. Esta costumbre, que también se ha extendido a septiembre, ha ganado popularidad en los últimos años gracias a la influencia de la cultura pop y las redes sociales.
Aunque muchas personas siguen la tradición, no todos conocen su origen. Según Infobae, la costumbre de regalar flores amarillas se popularizó a partir de la famosa canción “Flores amarillas”, de la telenovela argentina “Floricienta”. En la historia, la protagonista soñaba con recibir estas flores de su gran amor, lo que convirtió el gesto en un símbolo romántico que trascendió generaciones.
¿Por qué el 21 de marzo?
La elección de esta fecha no es casualidad. En el hemisferio norte, el 21 de marzo marca el inicio de la primavera, una estación asociada con la renovación, el amor y el florecimiento de la naturaleza después del invierno.
Por otro lado, en el hemisferio sur, donde la primavera comienza en septiembre, también se ha adoptado la costumbre de regalar flores amarillas en ese mes. De esta manera, la tradición ha encontrado una razón para celebrarse en dos momentos distintos del año.
El significado del color amarillo
El color amarillo es universalmente reconocido por transmitir alegría, energía y optimismo. En el lenguaje de las flores, este tono también simboliza la amistad, la prosperidad y el cariño sincero, lo que lo convierte en una opción perfecta para expresar afecto tanto en relaciones amorosas como en lazos de amistad.
¿Qué flores amarillas regalar?
Existen múltiples opciones para quienes desean sumarse a esta tradición. Algunas de las flores más populares en esta tonalidad son:
• Girasoles: Representan felicidad, vitalidad y admiración.
• Rosas amarillas: Simbolizan amistad y gratitud.
• Tulipanes amarillos: Relacionados con el éxito y la alegría.
• Crisantemos: Asociados con la longevidad y la lealtad.
• Gerberas: Expresan positividad y entusiasmo.
• Orquídeas amarillas: Representan belleza y elegancia.
• Caléndulas y narcisos: Vinculados con la buena suerte y nuevos comienzos.
Un gesto que trasciende las redes sociales
Si bien la tradición ha sido impulsada por plataformas digitales, regalar flores amarillas es una hermosa forma de expresar sentimientos positivos. No importa si se celebra en marzo o en septiembre, lo esencial es el significado detrás del detalle: compartir alegría y amor con las personas especiales en nuestra vida.