Encuentran superbacterias en nueve de cada diez productos de belleza usados
La investigación realizada por la Universidad de Aston, en el Reino Unido, encontró que las esponjas faciales son particularmente susceptibles a la contaminación.
La gran mayoría de los productos de maquillaje, como las esponjitas, la pestañita y el brillo labial, están contaminados con superbacterias potencialmente mortales, según revela una nueva investigación de la Universidad de Aston publicada en el ‘Journal of Applied Microbiology’.
Millones de personas usan productos de maquillaje todos los días y están contaminados con microorganismos potencialmente mortales, como ‘E. coli’ y los estafilococos, porque la mayoría no se limpian y se usan mucho más allá de sus fechas de caducidad, revela esta investigación dirigida por la doctora Amreen Bashir y el profesor Peter Lambert, de la Facultad de Ciencias de la Vida y la Salud de la Universidad de Aston (Reino Unido).
En su investigación encontraron bacterias que pueden causar enfermedades que van desde infecciones de la piel hasta envenenamiento de la sangre si se usan cerca de los ojos, la boca o cortes o raspones en nueve de cada diez productos. Este riesgo se amplifica en personas inmunocomprometidas que tienen más probabilidades de contraer infecciones por bacterias oportunistas.
Comprobaron que los mezcladores de moda, las esponjas utilizadas para aplicar productos de base para la piel, tenían los niveles más altos de bacterias potencialmente dañinas, y la gran mayoría (93 por ciento) nunca se había limpiado, a pesar de que el 64 por ciento se había caído al suelo en algún momento durante el uso.
La investigación es la primera en ver las esponjas faciales. A menudo respaldadas por celebridades, se estima que estas han vendido más de 6,5 millones en todo el mundo. Los investigadores de Aston encontraron que estos productos son particularmente susceptibles a la contaminación, ya que a menudo se dejan húmedos después del uso, lo que crea un caldo de cultivo ideal para bacterias dañinas.
Los investigadores dicen que los hallazgos revelan que los consumidores se están poniendo en riesgo sin darse cuenta, y que los fabricantes y los organismos reguladores deberían hacer más para proteger a sus clientes al hacer que las fechas de caducidad y los requisitos de limpieza estén más destacados en los envases.
La doctora Bashir advierte de que «las malas prácticas de higiene de los consumidores cuando se trata de usar maquillaje, especialmente las esponjillas, es muy preocupante cuando se considera que encontramos bacterias como ‘E. coli’, que está relacionada con las contaminación fecal, que se reproducen en los productos que probamos».
Por ello, defiende que «se necesita hacer más para ayudar a educar a los consumidores y a la industria del maquillaje en general sobre la necesidad de lavar las esponjitas regularmente y por secarlas completo, así como los riesgos de usar maquillaje más allá de su fecha de caducidad».