El origen de la mina que contiene el 90% de los valiosos diamantes rosa de la Tierra
Las extrañas gemas rosadas que hoy se venden en el mundo provienen, principalmente, de la mina Argyle, ubicada en Australia. Ahora, por fin se ha descubierto cómo surgió este yacimiento hace millones de años.
Al igual que el oro, los diamantes rosas son unos de los minerales más preciados y valorizados en la sociedad moderna por su extremada rareza en la superficie. Sin embargo, hay un detalle impresionante. Se estima que la mayoría de ellos ―más del 90%, según expertos y diversos estudios― se han extraído de un solo lugar. Este es la mina Argyle, ubicada al noroeste de Australia, muy cerca de la costa del continente.
Por casi cuatro décadas, hasta antes de su clausura, en noviembre de 2020, Argyle fue el mayor productor de diamantes de colores en el planeta y prácticamente el único yacimiento que, por alguna extraña razón, arrojaba minerales de color rosado hasta la corteza terrestre.
No obstante, tras muchos años de misterio, un equipo de científicos, liderado por el geofísico australiano Hugo Olierrok, por fin parece haber descubierto por qué la mina Argyle era tan diferente a las demás. Sus hallazgos, que tienen que ver con la ruptura de un antiguo supercontinente, se publicaron en septiembre de este año en un artículo de la revista Nature.
El origen de los diamantes de Argyle, Australia
Cuando los geólogos analizaron los cristales rosas de Argyle y midieron la edad de sus elementos, determinaron que estos se formaron hace unos 1.800 millones de años, cuando un fragmento de la placa tectónica de lo que hoy es Australia Occidental chocó con la del norte de Australia. Tras este evento, los minerales permanecieron en las profundidades de la Tierra.
Olierrok, investigador de la Universidad de Curtin, explica que los diamantes adquieren un determinado color cuando su estructura cristalina es sometida a una presión distinta. En ese sentido, una ligera presión ocasiona que el cristal transparente se torne rosa y que, por una mayor presión, se vuelva marrón.
Los minerales de Argyle estuvieron atrapados en el manto terrestre (una capa de 2.900 km de espesor que empieza a los 33 km de profundidad de la superficie continental) durante varios millones de años. Sin embargo, todo cambió cuando fueron arrojados violentamente a la superficie como consecuencia de un drástico movimiento en la tectónica de placas, hace 1.300 millones de años.
Según Olierrok y sus colegas, la fecha de este evento coincide aproximadamente con el proceso de fragmentación de Columbia, el primer supercontinente del que se tiene registro en la historia.
La fragmentación de Columbia
Varios estudios han identificado que existe una relación entre el brote de diamantes en la superficie y la separación de los continentes. Por esa razón, no resulta increíble que las gemas rosadas de Argyle hayan surgido tras la ruptura del supercontinente Columbia, también apodado Nuna.
Según la investigación, los diamantes rosa habrían brotado por las capas más delgadas de la corteza, que en este caso correspondían al borde continental. Esta también sería la razón por la cual la mina Argyle, a diferencia de otros depósitos de minerales, se encuentra cerca al litoral y no en la parte central de un continente.
«Argyle se encuentra en el punto donde la región de Kimberley y el resto del norte de Australia se estrellaron muchos años antes, y ese tipo de colisión crea un área dañada o ‘cicatriz’ en la Tierra que nunca sanará por completo», sostuvo Olierook en una entrevista.
“Si bien el continente que se convertiría en Australia no se dividió, el área donde se encuentra Argyle se estiró, incluso a lo largo de la cicatriz, lo que creó espacios en la corteza terrestre por los que el magma se disparó hacia la superficie, trayendo consigo diamantes rosas”, explicó.
¿Cuánto valen los diamantes rosas?
Según Australian Pink Diamond Exchange, el precio por quilate de los diamantes rosa varía dependiendo de su intensidad de color.
Aquellas gemas rosas que son claras, o pálidas, se venden entre 3.000 y 8.000 dólares; los de una intensidad intermedia, entre 10.000 y 30.000 dólares, y los de un rosa más intenso, entre 30.000 y 100.000 dólares.
El diamante rosa más caro vendido hasta ahora ha sido el Eternal Pink, que fue hallado en una mina de Bostwana en 2019. Se vendió en una subasta a más de 35 millones de dólares.