Japón lanzará al espacio el primer satélite de madera del mundo: tendrá el tamaño de una taza
En una iniciativa sin precedentes, Japón se prepara para enviar al espacio el primer satélite fabricado con madera, con el objetivo de combatir la contaminación espacial.
Japón ha anunciado un hito en la industria aeroespacial con planes para lanzar el primer satélite de madera del mundo, denominado LignoSat, en un esfuerzo por abordar el creciente problema de la contaminación espacial. Este proyecto innovador, desarrollado en colaboración entre la Universidad de Kyoto y Sumitomo Forestry, busca cambiar radicalmente nuestra comprensión de la sostenibilidad en el espacio.
El satélite de madera, del tamaño aproximado de una taza de café, representa una nueva era en el diseño y la construcción de tecnología espacial. Se espera que este satélite se desintegre por completo al reingresar a la atmósfera terrestre, reduciendo así el riesgo de escombros espaciales que representan una amenaza tanto para futuras misiones espaciales como para nuestro propio planeta.
La creación de LignoSat fue el resultado de una colaboración entre Sumitomo Forestry, especializada en gestión forestal y producción de madera, y la Universidad de Kyoto, con el respaldo de la NASA y JAXA. Este equipo multidisciplinario combinó su experiencia en materiales, ingeniería aeroespacial y sostenibilidad para hacer realidad el concepto de un satélite de madera, demostrando el potencial de este material como una alternativa viable para la tecnología espacial.
La madera de magnolia fue seleccionada después de un riguroso proceso de investigación y desarrollo, debido a sus propiedades únicas que le permiten resistir las duras condiciones del espacio. Pruebas realizadas en la Estación Espacial Internacional confirmaron que la madera no sufre daños después de la exposición al vacío espacial, cambios de temperatura y radiación. Además, se diseñó para quemarse de manera controlada al reingresar a la atmósfera, evitando así la generación de escombros adicionales.
La NASA y JAXA se han unido para llevar a cabo esta misión histórica, con planes de lanzar LignoSat en el verano de 2024. Este proyecto representa un paso significativo en la lucha contra la contaminación espacial, una problemática que ha ido en aumento desde el inicio de la era espacial en 1957. La acumulación de objetos y fragmentos en órbita representa un riesgo considerable para las misiones espaciales y la seguridad de la Estación Espacial Internacional.
La situación actual de la contaminación espacial es preocupante, con millones de objetos orbitando la Tierra y representando un riesgo para las actividades espaciales. La NASA y otros organismos están trabajando para mitigar estos riesgos, pero el crecimiento continuo de constelaciones de satélites comerciales plantea desafíos adicionales para el control y la gestión de la basura espacial.