Concluyen que medicamentos para el sida no son eficaces para pacientes con la COVID-19
Según el comunicado, varios ensayos clínicos no han demostrado ninguna eficacia contra el coronavirus, y que en cambio la dexametasona reduce la mortalidad en los pacientes más graves.
La asociación de los medicamentos antivirales lopinavir y ritonavir, empleada contra el virus del sida, no “es eficaz entre pacientes hospitalizados debido a la COVID-19”, según las conclusiones del ensayo clínico británico Recovery.
“Estos resultados preliminares muestran que para los pacientes hospitalizados por coronavirus y que no se hallan bajo respiración artificial, (la asociación) lopinavir-ritonavir no es un tratamiento eficaz”, juzgó en un comunicado el máximo responsable de Recovery, el doctor Peter Horby, de la Universidad de Oxford.
El ensayo, en cambio, no permitió sacar “ninguna conclusión” sobre su eventual eficacia en pacientes bajo respiración artificial puesto que estos eran insuficientes en número debido a la “dificultad de administrarles el medicamento”, según Recovery.
Los resultados todavía no han sido publicados en una revista especializada, etapa que permite una primera validación científica.
Previamente, Recovery mostró que la hidroxicloroquina tampoco era beneficiosa contra la COVID-19 y que en cambio, la dexametasona, un corticoide barato y ampliamente disponible, reduce la mortalidad de los enfermos más graves que se hallan bajo respiración artificial.
Para pronunciarse sobre la asociación lopinavir-ritonavir (comercializada bajo el nombre de Kaletra), los investigadores la administraron a 1.596 pacientes y compararon sus efectos con la evolución de otros 3.376 enfermos.
Resultado: no hubo ninguna diferencia significativa sobre la mortalidad al cabo de 28 días (22,1% en el primer grupo frente a 21,3% en el segundo). Tampoco hubo “ninguna prueba de un efecto beneficioso en la progresión de la enfermedad ni en la duración de la hospitalización”, según el comunicado.
Si bien decenas de tratamientos son objeto de ensayos clínicos en el mundo, ninguno ha demostrado hasta ahora una eficacia contundente contra el nuevo coronavirus, salvo la dexametasona entre los enfermos más graves.
En Europa, el remdesivir, un antiviral, es actualmente candidato a una comercialización tras haber sido promovido en Estados Unidos, a raíz de un estudio que mostró que reducía ligeramente el tiempo de recuperación de los enfermos hospitalizados (de 15 a 11 días de media), si bien no se determinó ningún impacto en cuanto a la mortalidad.