La NASA probó su aterrizaje en el peligroso asteroide que podría impactar contra la Tierra
Cuándo y por qué el asteroide Bennu podría chocar al planeta.
Lo consideran un éxito y no es para menos. La sonda espacial OSIRIS-REx logró acercarse al asteroide Bennu para probar sus sistemas de cara a un futuro aterrizaje en este cuerpo celeste, informa el Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA. Un peligroso asteroide que los científicos tienen en la mira.
A fine de octubre de este convulsionado 2020, el aparato tiene previsto aterrizar en la zona Nightingale del hemisferio norte del asteroide para recoger muestras de suelo y luego enviarlas a la Tierra.
Durante la prueba que duró unas cuatro horas, la nave se acercó a 40 metros del asteroide en modo totalmente automático y desplegó el mecanismo de adquisición de pruebas.
También, reflejan, experimentaron con otros científicos, así como un sistema de navegación autónomo para evitar choques en la superficie del asteroide, que hoy se encuentra a unos 288 millones de kilómetros de nuestro planeta.
«Se probaron muchos sistemas importantes durante este ensayo, desde comunicaciones, propulsores de naves espaciales y, lo más importante, el sistema de guía de seguimiento de características naturales a bordo y el mapa de peligros», explica Dante Lauretta, de la Universidad de Arizona en Tucson, principal investigador de la sonda.
Y reafirmó que la prueba dejó en claro que los sistemas de la nave espacial están listos para la misión de octubre, difunde también RT.
De acuerdo a los tiempos estimados, OSIRIS-REx abandonará la superficie de Bennu en 2021 y regresaría a la Tierra en septiembre de 2023 con una treintena de 30 paquetes de material del asteroide.
La sonda fue lanzada al espacio en septiembre de 2016. Desde que llegó al asteroide en 2018, estuvo orbitándolo y mapeando su superficie.
Alerta por Bennu en la Tierra
El Bennu posee un diámetro de unos 500 metros, y se lo considera un asteroide cercano al planeta.
Completa una órbita alrededor del Sol cada 436,604 días (1,2 año) y cada seis años se aproxima mucho a la Tierra. Estos encuentros cercanos hacen que exista una alta probabilidad de impacto a finales del siglo XXII.
Según la información del Centro de Estudios NEO del Laboratorio de Propulsión a Chorro (CNEOS), la fecha que pase dentro de la órbita de la Luna será en el año 2135.
La cercanía alterará ligeramente la órbita de Bennu, explican, y podría provocar el temido impacto entre 2175 y 2199.
Siendo un poco más fino con los números y quizá para quienes empiezan a sacar cuentas, calculan que el riesgo acumulado de impacto de Bennu es del 0,037 %. Esto significa que las probabilidades de choque son de una en 2.700.