Sacerdote herediano denuncia grave irrupción de la policía durante funeral
El incidente ocurrió el domingo a las 10:00 a.m. en el Cementerio Central de Heredia.
Guillermo Hidalgo Vargas, quien sirve en la parroquia La Inmaculada Concepción, en el centro de Heredia, denunció un grave abuso de autoridad durante una liturgia que se celebraba en el Cementerio General de la provincia cuando la Fuerza Pública y la Policía Municipal ingresaron al sitio e interrumpieron la celebración.
El sacerdote, comentó que el sábado llegaron unas personas a la Casa Cural para notificarle sobre el fallecimiento de una persona. Acordaron realizar el funeral el domingo 26 de julio a las 10 a.m.
“Éramos un poquito más de 10 personas cada uno con su cubreboca y guardando la distancia, pues literalmente nos echaron la policía entre esa la Policía Municipal y la policía normal llegaron ahí por dicha fue al final de la celebración”, indicó el cura.
“Pero lo que me impacta, es que sí se pueden hacer por la calle manifestaciones uno ve de peluqueros ahora van a hacer de autobuseros, la ANEP va a hacer de profesores esta semana que viene. Y si ven los buses hay más gente en el bus con su cubre boca con las ventanillas cerradas y nosotros al aire libre pues nos echaron la Policía”, añadió.
El cura párroco indicó, que la situación lo indignó, porque solo le dio tiempo de hacer un par de oraciones para despedir al difunto.
“A mí me dio cólera, ya al final que fue un evangelio, un Padre Nuestro y la despedida eso fue lo que di y cuando decía yo «dale el descanso eterno» cortito y qué hice yo así literalmente espante la mula”, dijo.
Hidalgo fue claro al señalar que: “Hay un silencio en este país para unos sí y nosotros que estábamos en el aire libre nos cae la Policía conste ya otro párroco por aquí en un funeral en su templo también le echaron la Policía. Cada uno en sus casas piense”, manifestó visiblemente molesto.
“La Policía Municipal de Heredia y la otra Policía (Fuerza Pública) sí permiten otros lugares abiertos. Veo que todo se apunta a lo que tiene que ver contra la fe y nosotros los cristianos echadotes ahí en los sillones”, concluyó.
“Ya es persecución religiosa”
El diputado del partido Nueva República, Jonathan Prendas, condenó lo sucedido al sacerdote herediano.
«Ya esto sí es el colmo. Lo que le pasó al padre Guillermo de la Parroquia La Inmaculada, en el centro de Heredia, ya es persecución religiosa disfrazada con la pandemia«, manifestó el legislador.
«El PAC nos está llevando a la irracionalidad, no sólo en lo económico y en lo social, sino también en lo religioso, que es de lo más sagrado para los costarricenses.Más que silenciando al pueblo, los están confinando y amedrentando al estilo de dictaduras totalitaristas. ¡Basta ya!”, finalizó Prendas.