La aparición del aterrador y extraño pez remo que podría haber anticipado el terremoto
La criatura marina habita en las profundidades y presagia la llegada de desastres naturales.
Las coincidencias, al menos, son aterradoras. Hace 13 días pescadores hallaron en la isla de Cozumel, en México, un pez remo. Según la cultura japonesa, es un presagio de tsunamis y terremotos. Pocas horas después de la aparición de la tenebrosa criatura, la CDMX tembló como hace años no ocurría. Creer o reventar.
El terremoto de 7,5 grados tuvo epicentro en Oaxaca, pero se sintió fuerte en la Ciudad de México. Si bien el susto fue terrible, no se reportaron daños materiales de consideración ni tampoco hubo personas heridas. El pez remo vive en aguas profundas, por lo cual es verdaderamente extraño encontrarlo. Su hábitat oscila entre los 200 y 1.000 metros de profundidad.
En japonés se lo conoce como Ryugu no tsukai, que significa “Mensajero del Palacio del Dios del Mar“. Según la creencia popular, cuando una gran cantidad de estos peces se dirigen a las playas, quiere decir que vendrá un terremoto o tsunami. Pasaron menos de dos semanas de esa terrible aparición y México tembló.
El caso más significativo donde se le atribuyó al pez remo la etiqueta de «mal augurio», fue el terremoto de Fukushima en 2011 -seguido de un tsunami- ya que meses anteriores se avistaron al menos una docena de peces remo en las costas de Japón, reportó en su momento el medio Kyodo News.
El hallazgo en México ocurrió cuando el propietario de una escuela de surf estaba pescando y lanzó el hilo de caña a un pez que estaba muy cerca de la superficie, aunque dice que no se movía. Al principio, el hombre creyó que era un pez dorado, pero después se dio cuenta que se trataba de un enorme pez remo.
Y según el mito, se crea una maldición para quien lo encuentra ya que es una alerta para el mundo por un posible y supuesto evento catastrófico proveniente del mar.
National Geographic marca sobre este animal: “Según la creencia tradicional, si aparecen muchos peces remos, podría ser señal de un terremoto inminente.”
El sismólogo Kiyoshi Wadatsumi había dicho antes del sismo en México: «Los peces de aguas profundas que viven cerca del fondo del mar son más sensibles a los movimientos de fallas activas que los que se encuentran cerca de la superficie del mar”.