China lanza al espacio el último satélite de navegación para competirle al GPS de EE.UU.
¿Cómo es el sistema de geolocalización de China, el rival del modelo estadounidense, el Galileo europeo y el GLONASS ruso.?
China lanzó al espacio el último satélite de su sistema de geolocalización Beidou (BDS), su alternativa al estadounidense GPS, desde la base de Xichang, en la provincia suroccidental de Sichuan.
El lanzamiento, producido a las 9.43 hora local (01.43 GMT), se produjo a través del cohete transportador «Larga Marcha 3B», informó la agencia estatal Xinhua.
El satélite, que entró en órbita con éxito 25 minutos después, completará la red de 35 aparatos de la tercera generación (BDS-3) del sistema Beidou (Osa Mayor en chino), que el país asiático impulsó en 2015 para poder ofrecer una cobertura global de posicionamiento.
El lanzamiento del último satélite, que estaba previsto para el pasado 16 de junio, había sido suspendido por «razones técnicas».
China comenzó a construir el Beidou hace 20 años, con el objetivo de ser autosuficiente en tecnología de navegación y disponer de un sistema alternativo al GPS.
Se compone de dos constelaciones de satélites separadas. El Beidou-1 consta de tres satélites que desde el año 2000 vienen ofreciendo cobertura limitada y servicios de navegación y posicionamiento para China y algunos países vecinos.
El Beidou-2 comenzó a operar en diciembre de 2011 con diez satélites en órbita y brinda servicios de navegación y posicionamiento a los países de la región Asia-Pacífico.
Con el Beidou-3, el sistema alcanzaría una cobertura global este año y estaría listo para proporcionar una alternativa a los otros tres existentes en la actualidad: el GPS estadounidense, el Galileo europeo y el GLONASS ruso.
Con 35 satélites, Beidou tendría más que los 31 del sistema estadounidense y también más que el sistema europeo y el ruso.
Según sus promotores, Beidou dispone además de un margen de desviación en la precisión de 10 centímetros, a diferencia de los 30 centímetros del GPS.
También confiaron que la inversión estimada de China en el proyecto supera los 10.000 millones de dólares.
Estiman que unos 200 países le habrían ya pedido a China las nuevas tecnologías que en la actualidad exporta a más de 120 naciones, según sus responsables.
De la vereda de enfrente, expertos estadounidenses reconocieron que Beidou tomó mucho de la experiencia del GPS al haberse diseñado algunas décadas después, por lo que sin dudas ofrece mejoras.
En China el 70% de los teléfonos móviles pueden recibir las señales de posicionamiento BDS, así como los sistemas de navegación de taxis, autobuses y camiones.