De azafata a repositora, se quedó sin volar y consiguió trabajo en un supermercado
Fue suspendida por una aerolínea y tuvo que cambiar de rubro.
Una azafata cambió los pasillos de los aviones por la variedad de los productos de un supermercado después de ser suspendida por una aerolínea. La crisis por la pandemia de coronavirus afectó cientos de actividades en todo el mundo y la aviación comercial resultó muy impactada.
Sin certezas sobre cuando volverán a operar los aviones, una azafata de 36 años no se quedó con los brazos cruzados. Y luego de ser suspendida, consiguió trabajo como repositora en un supermercado.
Sara Haider vive en Inglaterra y hasta hace pocas semanas trabajaba en la aerolínea Virgin Atlantic, del polémico empresario Richard Branson. Pero ahora, en su nueva función, debe reponer alimentos congelados en el market Asda, de la localidad de Lacing.
Un trabajador de tiempo completo en ese supermercado puede ganar unos 1.500 dólares mensuales, un dinero que Sara no puede despreciar ahora que se quedó sin trabajo.
«Tan pronto como descubrí que me habían suspendido, no quería sentarme y no hacer nada. Muchas veces volé a Estados Unidos, el Caribe, el Lejano Oriente y Sudáfrica. Siempre traté con personas, es mi forma de mantenerme activa», recordó.
«Así que ahora este trabajo en el market para mí es perfecto mí mientras esperamos que la vida vuelva a la normalidad», dijo. «Estoy muy agradecida de poder volver a trabajar».
Su compañía, Virgin Atlantic, dejó de volar el 23 de marzo, hace más de un mes. Y desde allí comenzaron sus dificultades económicas, que ahora pudo encaminar con su nuevo trabajo.
Virgin Atlantic se encuentra al borde de la quiebra luego de que Delta Airlines, dueña del 49% de la aerolínea, descartara inyectar 534 millones de dólares de apoyo financiero.
Richard Branson, fundador de Virgin Atlantic, prevé el colapso de la aerolínea si no consigue 615 millones de dólares en préstamos del gobierno británico